Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció este miércoles la ejecución en Puerto Príncipe de dos pacientes por parte de la policía y un grupo de autodefensas, así como la violencia contra uno de sus equipos de ambulancia.
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En un comunicado de prensa publicado en Ginebra, la ONG “condena con la mayor firmeza la muerte de varios pacientes, ejecutados después de que la ambulancia de MSF en la que viajaban fuera detenida por miembros de una brigada de vigilancia y agentes del orden”.
El ataque tuvo lugar el 11 de noviembre, informa MSF, que indica que una de sus ambulancias, que transportaba a tres jóvenes heridos de bala, fue obligada por la policía haitiana a dirigirse al hospital público de La Paix, en lugar de a su propio establecimiento en Drouillard.
“En el lugar, agentes del orden y miembros de un grupo de autodefensa rodearon la ambulancia, pincharon los neumáticos y echaron gasolina al personal de MSF dentro del vehículo para obligarlos a salir”, informa la ONG. “Luego llevaron a los heridos un poco más lejos, fuera del recinto del hospital, donde mataron a tiros al menos a dos de ellos”, continúa el comunicado.
Según la ONG, el personal de la ambulancia fue atacado violentamente.
“Este acto es increíblemente violento, tanto para los pacientes como para el personal médico de MSF, y pone seriamente en duda la capacidad de MSF para poder prestar atención esencial a la población haitiana, que carece de ella”, declara Christophe Garnier, jefe de la misión citada. en el comunicado de prensa. “Nuestros equipos y nuestros pacientes necesitan un mínimo de seguridad para seguir brindando atención médica”, añadió.
Haití ha sufrido una inestabilidad política crónica durante décadas. Pero en los últimos meses, este país caribeño ha tenido que afrontar un nuevo resurgimiento de la violencia de las pandillas, que controlan el 80% de la capital de Puerto Príncipe.
Estos grupos armados, acusados de numerosos asesinatos, violaciones, saqueos y secuestros para pedir rescate, decidieron a principios de año unir fuerzas para derrocar al primer ministro Ariel Henry.
El 11 de noviembre prestó juramento el nuevo Primer Ministro haitiano, Alix Didier Fils-Aimé. Prometió “restaurar la seguridad” en el país tras la destitución de su predecesor por el Consejo Presidencial de Transición.
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