Un ataque aéreo tuvo como objetivo la región de Baalbeck, en el este del Líbano, al amanecer del miércoles, en “violación” de la frágil tregua observada por el ejército israelí y Hezbolá, informó la agencia nacional de información libanesa ANI.
El alto el fuego entre Israel y el movimiento islamista armado proiraní entró en vigor el 27 de noviembre, tras dos meses de guerra abierta en un contexto de tensiones regionales en Oriente Medio, alimentadas por el conflicto de Gaza. La tregua se mantiene en general a pesar de las acusaciones mutuas de repetidas violaciones.
El ataque del miércoles a un edificio en las proximidades de la ciudad de Tarya “no causó víctimas”, precisó la ANI, calificando el incidente como “la primera violación del acuerdo de alto el fuego” en Baalbeck.
Hablando anónimamente, una fuente de seguridad local dijo a la AFP que el ataque, alrededor de las 02H40 (después de la medianoche GMT), tuvo como objetivo “almacenes que se cree pertenecen a Hezbollah”.
Se creó un comité que reúne a Francia, Estados Unidos, Líbano, Israel y las fuerzas de paz de la ONU en la FPNUL para monitorear la aplicación del alto el fuego y las posibles violaciones por ambas partes.
Las autoridades libanesas han pedido que se presione a Israel para que detenga lo que describen como violaciones. Por su parte, el ejército israelí informó el domingo de la destrucción en territorio libanés de “instalaciones de almacenamiento de armas”, afirmando que actuaba “de conformidad con el alto el fuego y los acuerdos entre Israel y Líbano”.
“Para que el ejército (libanés) pueda cumplir plenamente sus misiones, el comité debe (…) presionar al enemigo israelí para que ponga fin a todas las violaciones”, insistió además el lunes el primer ministro libanés, Najib Mikati.
El mismo día, la FPNUL, la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano, pidió “una aceleración de la retirada del ejército israelí” del sur del Líbano.
Según el acuerdo de tregua, el ejército libanés y las fuerzas de paz de la ONU se desplegarán en el sur del Líbano y el ejército israelí se retirará durante un período de 60 días.
