Béryl, que avanza entre 30 y 40 km/h hacia el oeste, estaba situada el martes al mediodía a unos 200 kilómetros al sur de Martinica, todavía en alerta. Es el primer huracán que alcanza la etapa 5/5 tan temprano en la temporada de huracanes, un récord. El lunes las condiciones eran más degradadas en Martinica debido a un fuerte oleaje ciclónico (olas de 4 a 5 m) y a un viento que alcanzó los 100 km/h en el sur de la isla. Las precipitaciones acumuladas alcanzaron entre 80 y 100 mm y hasta 150 mm en las tormentas más fuertes.
Jamaica en la mira
En las próximas horas, Béryl debería cambiar su trayectoria hacia el suroeste. El huracán pasó el martes entre las islas de Granada y Santa Lucía. Podría golpear con fuerza a Jamaica el jueves después de azotar la isla de Granada y San Vicente y las Granadinas con vientos superiores a 200 km/h.
¿Cómo podemos explicar la repentina intensificación de este huracán?
El explosivo desarrollo de Béryl puede explicarse por varios parámetros y, en particular, por las aguas anormalmente cálidas para la temporada en el Mar Caribe (+2 a +3°C por encima de lo normal). Sin embargo, la temperatura del agua juega un papel crucial en el desarrollo de los huracanes.
De hecho, para que se desarrolle un huracán, la temperatura del agua superficial debe superar los 26,5°C a una profundidad de al menos 60 metros. Estas condiciones favorecen la evaporación. A medida que asciende, este aire se enfría provocando la condensación del vapor de agua que libera energía en forma de calor. A su vez, este calor potencia el ascenso del aire, provocando fuertes vientos y fuertes lluvias. Este círculo vicioso permite que el huracán se forme y gane potencia. Cuanto más cálida y profunda sea el agua, más combustible tendrá el huracán para impulsarlo. Cabe señalar que estas altas temperaturas del mar se vienen produciendo desde hace varios meses y ya se han batido muchos récords.
El otro parámetro que favoreció el desarrollo de Béryl es el fenómeno climático de La Niñalo que provoca situaciones meteorológicas más favorables a la aparición de ciclones en esta parte del globo.
Béryl es el segundo huracán de categoría 5 que aparece en julio, después del huracán Emily en 2005. Emily generó vientos de 260 km/h y provocó la muerte de 17 personas, con daños estimados en más de mil millones de dólares.
Huracán Beryl: temperaturas anormalmente cálidas en el Golfo de México. © gmatricon
