La administración del presidente estadounidense Joe Biden propuso el martes nuevas reglas destinadas a proteger el trabajo en temperaturas extremadamente altas, mientras las olas de calor intensificadas por el cambio climático se extienden cada vez más por todo el país. Las regulaciones afectarían a los carteros, repartidores, trabajadores de la construcción, paisajistas, personal de restaurantes y otras personas expuestas a índices de calor persistentemente altos, que miden la temperatura que sienten los humanos.
La medida, que se aplicaría a unos 35 millones de trabajadores, según el gobierno, se aplicaría a quienes trabajan en interiores o exteriores y que pueden esperar estar expuestos a un índice de calor de 80 grados Fahrenheit (26 grados Celsius) o más. . “El objetivo de esta norma es reducir significativamente el número de muertes, lesiones y enfermedades sufridas por los trabajadores que están expuestos a un calor excesivo… simplemente porque están haciendo su trabajo”, dijo a los periodistas un alto funcionario de la administración.
Según estas regulaciones, los empleadores deberían desarrollar planes de prevención de lesiones y enfermedades relacionadas con el calor y nombrar un coordinador de seguridad térmica en el lugar de trabajo. Si el índice de calor alcanzara los 80 grados Fahrenheit, los trabajadores necesitarían recibir agua potable y tener acceso a áreas de descanso a la sombra o espacios con aire acondicionado. Algunos trabajadores, como el personal médico de emergencia, no estarían sujetos a la nueva regla.
Este anuncio, que se produce cuando llega el verano en todo Estados Unidos, es parte de una serie de medidas reveladas el martes por la administración Biden con respecto al calor extremo. Sin embargo, esta nueva regla podría ser eliminada por una nueva administración si Joe Biden no es reelegido en noviembre.
