La invasión rusa de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero de 2022, marcó un importante punto de inflexión en la percepción de la seguridad internacional. Ese mismo día, Anton (nombre cambiado), ex oficial de una base nuclear rusa, dijo que las fuerzas nucleares del país habían sido puestas en alerta máxima. Este testimonio exclusivo, recogido por el bbcofrece una visión poco común del interior de una de las mayores potencias nucleares del mundo.
Una base nuclear en alerta máxima
Según Anton, las armas nucleares estaban listas para ser utilizadas en el aire o en el mar desde el primer día del conflicto. Aunque no participó directamente en la guerra, su unidad era responsable de proteger estas armas estratégicas. La vida dentro de esta base ultrasecreta, aislada de todo, estaba estrictamente regulada: ausencia total de teléfonos móviles y visitas familiares sujetas a la aprobación de los servicios de seguridad (FSB) con meses de antelación.
paga | Número de ojivas operativas | Número de ojivas desplegadas |
---|---|---|
Rusia | 4 380 | 1 700 |
Estados Unidos (OTAN) | Medio ambiente 4 000 | 1 644 |
Fuente: Federación de Científicos Americanos
Esta alerta duró sólo unas pocas semanas, pero fue suficiente para revelar el alcance de las tensiones geopolíticas.
Una doctrina nuclear modificada
- Autorización de una huelga en respuesta a un ataque convencional masivo.
- Inclusión explícita del apoyo extranjero (estados nucleares) en los criterios de respuesta.
- Mantener la capacidad de ataque no estratégico (armas nucleares tácticas).
Estos cambios, sumados a las recientes pruebas de misiles, están intensificando las preocupaciones en Occidente.
Entre el mantenimiento y la obsolescencia
Los expertos occidentales cuestionan la funcionalidad de las armas rusas, argumentando que parte del arsenal data de la época soviética. Sin embargo, Anton rechaza esta idea e insiste en que las fuerzas nucleares se mantengan en alerta constante. Menciona patrullajes permanentes por tierra, mar y aire, así como rigurosos programas de entrenamiento para soldados.
El trabajo de mantenimiento de armas nucleares no se detiene ni un solo minuto
Preguntas sobre la credibilidad del arsenal:
¿Pueden estos sistemas envejecidos competir con las tecnologías occidentales modernas?
¿Podría la escalada militar conducir a un error estratégico fatal?
Soldados reacios ante una guerra injustificada
Para Anton, la línea roja se cruzó cuando se le pidió que promoviera propaganda afirmando que los civiles ucranianos eran combatientes legítimos. Negándose a obedecer esta orden, fue trasladado a una brigada de combate convencional, a menudo enviado al frente como “carne de cañón”.
El caso de Anton pone de relieve un fenómeno poco debatido: muchos militares rusos desaprueban la guerra. Con la ayuda de organizaciones humanitarias, logró huir de Rusia, pero no sin correr el riesgo de sufrir graves represalias. A pesar de las dudas sobre el estado de su equipamiento, Rusia mantiene una colosal fuerza de disuasión nuclear. Con 1.700 ojivas listas para su despliegue, su arsenal sigue siendo uno de los más impresionantes del mundo. Los recientes desarrollos doctrinales, asociados con crecientes tensiones geopolíticas, nos recuerdan que la amenaza nuclear nunca está completamente descartada.