El fiscal especial Jack Smith recomendó el lunes detener los cargos federales contra Donald Trump, confirmando una victoria legal para el presidente electo. Estos procedimientos, vinculados a acusaciones de intentos ilegales de anular los resultados de las elecciones de 2020 y de retención de documentos clasificados tras su salida de la Casa Blanca, están ahora suspendidos.
Desde las elecciones del 5 de noviembre, este resultado parecía cada vez más probable. Jack Smith ya había cancelado los plazos previstos en los dos casos, explicando que debía “analizar esta situación sin precedentes y determinar el curso de acción a seguir de acuerdo con la política del Departamento de Justicia”.
“Las circunstancias han cambiado”
En su petición a la jueza Tanya Chutkan en Washington, el fiscal especial justificó esta decisión en estos términos. “La posición de la fiscalía sobre el fondo del proceso contra el acusado no ha cambiado. Pero las circunstancias han cambiado”, escribió. Invocó una política de larga data, adoptada hace más de cincuenta años por el Departamento de Justicia, que prohíbe procesar a un presidente en ejercicio.
Jack Smith pidió que se cancelen estas demandas antes de que Donald Trump preste juramento el 20 de enero de 2025, al tiempo que enfatizó que podrían reactivarse después de su mandato.
Conspiración y violación del derecho al voto
Las acusaciones contra Donald Trump incluyeron acusaciones de “conspirar contra las instituciones estadounidenses” y “socavar el derecho de los votantes a votar”. En un caso separado en Florida, el expresidente fue acusado de guardar documentos clasificados, como planes militares e información sobre armas nucleares, en su residencia privada en Mar-a-Lago.
Encuentra toda nuestra información sobre Donald Trump
En este último caso, Jack Smith también renunció a su apelación respecto de una decisión de la jueza Aileen Cannon, que había anulado el procedimiento por razones constitucionales relacionadas con el nombramiento y financiación del fiscal especial. Sin embargo, mantiene su llamamiento a dos ex asistentes personales de Donald Trump, implicados en este asunto.
“gran victoria para el Estado de derecho”
Donald Trump y su equipo de campaña reaccionaron de inmediato a este anuncio. “Estas demandas, como todas las que me han infligido, son vacías e injustas y nunca debieron haberse presentado”, dijo Donald Trump en su red social Truth Social. Su equipo celebró una “gran victoria del Estado de derecho”, al tiempo que denunció una “instrumentalización política del sistema judicial”.
La jueza Tanya Chutkan validó la solicitud del fiscal especial de retirar los cargos, implementando así una política destinada a no procesar a un presidente en ejercicio. Jack Smith calificó esta situación de “sin precedentes” y requirió ajustes de acuerdo con los principios establecidos por el Departamento de Justicia.
