Un ataque aéreo estadounidense en Somalia el mes pasado pudo haberle costado la vida al líder del Estado Islámico (EI), Abdulqadir Mumin, informó el sábado la cadena NBC.
Fuentes anónimas dijeron al canal de televisión estadounidense que Abdulqadir Mumin era el objetivo de la operación.
A finales de mayo, Estados Unidos ya había anunciado este bombardeo, indicando en un comunicado de prensa que tres combatientes del EI habían muerto, sin proporcionar detalles sobre el objetivo principal. Ahora, fuentes anónimas dicen a NBC que el objetivo de este ataque era neutralizar a Mumin, ya identificado por Estados Unidos como el líder de la rama somalí de ISIS.
Según NBC, este último se convirtió el año pasado en el líder mundial de la organización terrorista, sucediendo a su predecesor, asesinado en Siria en 2022.
ISIS, que había conquistado vastos territorios en Irak y Siria hace unos diez años, vio colapsar su autoproclamado “califato” en 2017 bajo los golpes de una coalición internacional. Sin embargo, según se informa, el grupo terrorista mantiene miles de combatientes en todo el mundo.
Se dice que la rama somalí, considerada relativamente pequeña, tiene entre 100 y 200 combatientes armados, según una fuente estadounidense del Departamento de Defensa.
