Francia: los agricultores contra el acuerdo con Mercosur

“Francia, ¿todavía quieres a tus campesinos?”: Los agricultores franceses se movilizaron una vez más el lunes, menos de un año después de un movimiento de ira sin precedentes en el campo ante la posibilidad de que la perspectiva de un acuerdo con Mercosur volviera a encenderse.

La alianza sindical FNSEA-JA, mayoritaria en el sector en Francia, ha lanzado más de 80 acciones simbólicas, preludio de un nuevo ciclo de movilización.

Durante todo el día, estas organizaciones multiplicaron los símbolos.

Plantaron cruces en Var (sur) para evocar el peligro mortal que enfrenta la agricultura francesa.

Bloquearon el Puente Europa que conecta Estrasburgo con Alemania para enviar un mensaje a la Comisión Europea, que parece decidida a concluir rápidamente un acuerdo de libre comercio con los países latinoamericanos del Mercosur.

Este tratado, negociado desde hace más de 20 años, prevé en particular cuotas de importación de carne de vacuno con derechos de aduana reducidos o nulos.

De Bélgica a París

Cerca de la frontera belga, los agricultores controlaban los vehículos pesados. Frente a la prefectura de Vesoul (este), 180 agricultores colocaron carteles de aldea y arrojaron tres contenedores llenos de rastrojos de maíz.

“No queremos un bloqueo concreto como el que vimos el año pasado”, afirmó el lunes por la mañana Pierrick Horel, presidente de Jóvenes Agricultores (JA), en la radio RMC.

Los impacientes habían sacado los tractores el domingo, yendo en procesión cerca de la base aérea de Villacoublay, cerca de París, desde donde voló Emmanuel Macron para el G20 en Río, Brasil. “Macron, si vas a Río, no te olvides de tus paletos”, proclamaba una pancarta colgada en un puente.

“Tolerancia cero”

El domingo, el ministro del Interior, Bruno Retailleau, advirtió que habría “tolerancia cero” en caso de “bloqueo sostenible” de las carreteras.

Menos de un año después de un gran movimiento de ira en el campo, que en enero se tradujo en bloqueos de tramos de carreteras del país, los sindicatos agrícolas llaman una vez más a sus tropas a manifestarse, pero de forma dispersa, acercándose a sus elecciones profesionales, que se celebrará en enero.

Afectados por las malas cosechas y las enfermedades animales emergentes, creen que todavía no han cosechado los frutos de la ira del invierno pasado.

Y consideran que las normas son más complejas que nunca y que los ingresos son insuficientes.

Después del combustible, derechos de aduana.

Si los impuestos sobre los combustibles agrícolas fueron uno de los catalizadores de la movilización del año pasado, es el resultado del propuesto acuerdo de libre comercio de la Unión Europea (UE) con los países del Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia) que podría prender fuego a las cosas este año.

A pesar de la oposición de la clase política y de los actores agrícolas franceses, la UE parece decidida a firmar este acuerdo antes de finales de año, que permitirá a los países latinoamericanos vender más carne de vacuno, pollo o azúcar sin derechos de aduana en Europa.

Exportaciones facilitadas

Varios países europeos, entre ellos España y Alemania, quieren que se cierre el acuerdo, que favorecería la exportación de coches, máquinas o productos farmacéuticos de la Unión Europea.

Pero los agricultores franceses temen una competencia desleal por parte de productos que no están sujetos a las estrictas normas medioambientales y sanitarias vigentes en Europa.

Por eso el FNSEA y su aliado JA decidieron relanzar la movilización el lunes y martes, fechas de una cumbre del G20 en Brasil.

Sin firma “tal cual”

En Buenos Aires, el presidente francés, Emmanuel Macron, dijo el domingo que Francia no “firmaría tal como está” el tratado de libre comercio.

Francia lleva semanas explicando que está “buscando aliados” en la UE para rechazar una firma.

Y el lunes, el ministro italiano de Agricultura, Francesco Lollobrigidra, dijo que consideraba que el tratado con Mercosur era, “en su forma actual”, “inaceptable”.

“Debemos verificar de antemano el respeto por parte de los países del Mercosur de las mismas obligaciones que imponemos a nuestros agricultores en materia de respeto de los derechos de los trabajadores y del medio ambiente”, justificó este ministro miembro de Fratelli d’Italia, el partido de extrema derecha liderado por Giorgia Meloni, de quien es cercano.

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AFP/Myrtille Wendling

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