Al visitar este miércoles el Comando Norte de las FDI, el Ministro de Defensa israelí, Israel Katz, adoptó una postura firme respecto al conflicto con Hezbollah, descartando categóricamente cualquier alto el fuego y prometiendo una intensificación de las operaciones militares.
“No nos detendremos, no quitaremos el pie del acelerador y no aceptaremos ningún acuerdo que no incluya el logro de nuestros objetivos de guerra”, afirmó Katz durante su primera visita al Comando Norte, acompañado por el jefe del Estado Mayor, Herzi Halevi. y el comandante del Frente Norte, general Uri Gordin. El Ministro destacó los recientes éxitos de las operaciones israelíes: “Hemos asestado duros golpes a Hezbollah y eliminado a Nasrallah. Precisamente ahora debemos seguir atacando con todas nuestras fuerzas para obtener los frutos de la victoria”. Destacó en particular la expansión de las operaciones terrestres en el sur del Líbano y los ataques contra la infraestructura de Hezbollah en el distrito Dahiyeh de Beirut.
Las condiciones israelíes para cualquier resolución futura del conflicto son claras y no negociables según Katz: el desarme completo de Hezbollah, la retirada de la organización más allá del río Litani, la garantía del regreso seguro de los residentes del norte de Israel a sus hogares y mantener el derecho de Israel a actuar militarmente contra cualquier actividad terrorista. “Estamos pagando un precio alto y doloroso”, reconoció el ministro, enviando sus condolencias a las familias de los soldados caídos y sus deseos de recuperación a los heridos. Sin embargo, destacó la importancia estratégica de los actuales éxitos militares: “El mundo entero observa y admira nuestros logros. Esto también fortalece el poder del Estado de Israel, y debemos utilizarlo para alcanzar nuestros objetivos de la guerra de la forma más rápida y eficaz posible. posible.” Esta visita se produce en un contexto de crecientes tensiones en la frontera norte de Israel, donde los intercambios de disparos con Hezbolá se han intensificado desde el inicio de la guerra en Gaza. En particular, el ministro pudo examinar el gran arsenal incautado en las bases y en los cuarteles generales de Hezbolá durante las últimas operaciones.
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