Los elementos iniciales de la investigación sugieren que el hombre pudo haber cometido su acto debido a “su insatisfacción con la división de bienes tras su divorcio”.
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Los periodistas de la AFP presentes en el lugar el martes por la tarde vieron numerosas flores y velas depositadas en la entrada del complejo deportivo, en homenaje a las víctimas.
Durante la noche, sin embargo, los agentes comenzaron a retirar estos ramos y velas, y uno de ellos explicó que estaban aplicando instrucciones “desde arriba”.
La policía y los agentes de seguridad también impidieron a las personas que se encontraban en las inmediaciones del lugar del ataque grabar vídeos.
Es el caso, en particular, del periodista de la BBC Stephen McDonell, corresponsal en China, a quien un hombre enojado empujó y le ordenó que dejara de filmar. La identidad y el papel de este hombre no han sido aclarados.
Imágenes difundidas el lunes por la noche, geolocalizadas por la AFP, mostraban a personas tendidas inmóviles en el suelo, mientras los transeúntes intentaban reanimar a otras víctimas.
Un testigo citado por la revista china Caixin dijo que el vehículo estaba dando vueltas, presumiblemente en un intento de llegar al mayor número de personas posible.
“La gente resultó herida en todas las zonas de la pista de carreras: este, sur, oeste y norte”, dijo.
La policía informó el lunes de que un coche había atropellado a peatones, pero sólo mencionó heridos. Los videos del drama también fueron eliminados de las redes sociales.
El presidente chino, Xi Jinping, pidió que se haga “todo lo necesario” para tratar a los heridos y pidió que el perpetrador sea “castigado conforme a la ley”, según la agencia oficial de noticias Xinhua.
El incidente ocurrió mientras Zhuhai albergaba el espectáculo aéreo civil y militar más grande de China.
