En Ucrania domina la preocupación, mientras que en Israel prevalece el sentimiento opuesto. Los resultados de estas elecciones presidenciales fueron recibidos con cierto entusiasmo.
Benjamín Netanyahu también fue uno de los primeros en celebrar la victoria de Donald Trump, saludando “el mayor regreso de la historia”. Unas palabras halagadoras para el presidente electo, porque en 2020, Donald Trump tuvo dificultades para aceptar que Netanyahu reconociera la victoria de Biden, lo que había tensado sus relaciones. Tras este mensaje, el primer ministro israelí mantuvo una conversación telefónica con Trump, según su oficina.
En general, la mayoría de los políticos israelíes, tanto de la mayoría como de la oposición, felicitaron a Trump, citando un fortalecimiento de las relaciones entre Israel y Estados Unidos.
¿Sobre el impulso de su primer mandato?
¿Qué están esperando los israelíes? Esperan que Trump mantenga el impulso de su primer mandato, durante el cual incrementó los gestos diplomáticos a favor de Israel, en particular trasladando la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén. También existe la expectativa de una política dura hacia Irán, ya que los israelíes quieren un fortalecimiento de las sanciones económicas contra Teherán.
En los círculos de extrema derecha israelíes, las expectativas sobre un nuevo mandato de Trump son altas. Algunos líderes del movimiento de asentamientos esperan, por ejemplo, que el nuevo presidente alivie las sanciones contra los colonos violentos, impuestas por la administración Biden, y permita la expansión de los asentamientos en la Cisjordania ocupada.
Del lado palestino, las reacciones son más cautelosas. La Autoridad Palestina de Mahmoud Abbas simplemente expresó, en un comunicado, su aspiración de trabajar con el nuevo presidente Trump. Hamás, por su parte, ha indicado que juzgará a Trump por sus acciones como presidente electo.