En Estados Unidos, el recuento de votos por correo crea una discrepancia con los resultados de los colegios electorales. Un fenómeno que beneficia a los demócratas, representados por el color azul. Este “giro azul” también había marcado las últimas elecciones y podría repetirse el 5 de noviembre.
En todas las elecciones presidenciales de Estados Unidos, el proceso de contar los votos enviados por correo genera un retraso a veces sorprendente. A menudo, un candidato republicano parece estar a la cabeza nada más cerrar las urnas, un “espejismo rojo” (el rojo es el color que representa a los republicanos, Nota del editor) que luego se desvanece con el recuento progresivo de los votos por correo, favoreciendo a menudo a los demócratas. Este fenómeno, denominado “deslizamiento azul”, marcó las elecciones de 2020 y podría repetirse en 2024.
Un conteo lento pero preciso
La noche de las elecciones presidenciales de 2020, el 3 de noviembre, el duelo entre Donald Trump y Joe Biden seguía indeciso en varios estados clave. El proceso de recuento de votos duró varios días, cambiando la ventaja inicial de Trump con el paso de los días. Finalmente, el 7 de noviembre, cuatro días después, CNN pudo proyectar la victoria de Joe Biden.
Un estudio del MIT mostró que los condados ganados por Biden contaban más lentamente que los ganados por Trump, en parte debido a la gran cantidad de votos por correo. En estados como California, abrumadoramente demócrata, cada votante recibe automáticamente una boleta por correo, lo que ralentiza el conteo.
Cambios para acelerar el proceso.
Este año, ciertas reformas apuntan a acelerar el conteo. En Georgia, por ejemplo, una nueva ley electoral fomenta la votación anticipada en persona y limita la aceptación de votos por correo. Brad Raffensperger, secretario de Estado de Georgia, asegura que la mayoría de los votos deberían contarse antes de las 20.00 horas de la noche electoral, añadiendo que “el 75% de los resultados se conocerán a esa hora”.
En Carolina del Norte, un cambio notable es dejar de aceptar boletas por correo que lleguen después del día de las elecciones. Otros estados, como Michigan, ahora permiten el procesamiento temprano de boletas por correo, lo que también debería acelerar los resultados.
Resultados potencialmente largos en caso de elecciones reñidas
Aunque los márgenes son ajustados, los resultados finales pueden llevar tiempo. En Pensilvania, el director electoral, Al Schmidt, pide paciencia y nos recuerda que la integridad del proceso es más importante que la velocidad.
Recuerda que “durante las elecciones de 2020, el período entre el cierre de las urnas y el anuncio de los resultados estuvo propicio para acusaciones infundadas de fraude”. En casos como las elecciones de 2000 en Florida, el recuento duró 36 días hasta que intervino la Corte Suprema.
Priorice la precisión, no la velocidad
La Secretaria de Estado de Michigan, Jocelyn Benson, destaca la importancia de obtener resultados precisos. “Siempre daremos prioridad a la precisión y la seguridad sobre la velocidad”, dijo, esperando que los resultados de Michigan se conozcan el 6 de noviembre.
El proceso sigue siendo impredecible, pero los funcionarios electorales están tratando de generar confianza en su transparencia. En última instancia, determinar el ganador de 2024 podría llevar unas horas… o varios días.
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