Alma Bohadana caminaba el lunes por una calle de Río de Janeiro con un amigo cuando los dos peatones vieron una motocicleta que se acercaba en su dirección. Temiendo que les robaran, los dos turistas echaron a correr. La mujer israelí acabó saltando un muro, probablemente sin saber que detrás de él sólo había vacío. La desafortunada mujer cayó desde 15 metros y se estrelló en un bosque.
Marcio da Silva bajaba de un autobús cuando escuchó a los testigos del accidente pedir ayuda. “No vi cómo cayó. Cuando llegué, ella ya estaba en el suelo, inconsciente. Intenté salvarle la vida, pero no pude”, le cuenta a G1. De hecho, los servicios de emergencia recién pudieron constatar la muerte de la joven de 22 años cuando llegaron al lugar.
Dan Hen, que estaba con Alma en el momento de la tragedia, explicó a la policía que él y la joven se sintieron amenazados por una motocicleta roja que se les acercaba, pero que no habían blandido ningún arma. El turista dijo que conoció a Alma en un hotel de Copacabana, donde el israelí se alojaba desde hacía unos diez días. “Ella era cariñosa, sonreía, cantaba y hablaba mucho. Incluso hizo un dibujo en una pared del hotel”, testifica un empleado del establecimiento. El turista llevaba más de tres meses en Brasil.
La policía, que no descarta ninguna hipótesis, está intentando determinar si efectivamente pasó por allí una motocicleta. En particular, se analizarán imágenes de videovigilancia de los alrededores.
