Este año, Estados Unidos y el Reino Unido impusieron sanciones a Rusia por su uso del arma química cloropicrina contra tropas en Ucrania, meses antes de que Igor Kirillov fuera asesinado en Moscú el martes.
En mayo, el Departamento de Estado de EE.UU. evaluó que Rusia había utilizado cloropicrina -un agente antidisturbios utilizado por primera vez en la Primera Guerra Mundial- contra las fuerzas ucranianas, lo que, según dijo, violaba la Convención internacional sobre armas químicas (CAQ), de la que Rusia es miembro. signatario.
La cloropicrina, un irritante que afecta los ojos, la piel, la garganta y los pulmones, se fabricó para usarse como gas lacrimógeno durante la guerra de trincheras de la Primera Guerra Mundial, pero fue prohibida en virtud de la CAQ en 1993.
En octubre, el Reino Unido sancionó al propio Kirillov, diciendo que era “responsable de ayudar a desplegar” armas químicas en los campos de batalla de Ucrania.
“Las fuerzas rusas han admitido abiertamente el uso de armas químicas peligrosas en el campo de batalla, con un uso generalizado de agentes antidisturbios y múltiples informes sobre el uso del agente asfixiante tóxico cloropicrina, utilizado por primera vez en los campos de batalla de la Primera Guerra Mundial”, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino Unido.
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