La Real Sociedad recibe este domingo a la UD Las Palmas en partido correspondiente a la jornada 17 de Liga. El cuadro txuri-urdin va a tener enfrente a un rival revitalizado por la llegada a su banquillo de Diego Martínez tras el cese de Luis Carrión, habiendo ganado cinco de los siete encuentros del campeonato disputados desde el relevo. Lo cierto es que, con el propio Carrión a los mandos, los canarios venían generando ocasiones en casi todos sus duelos, pero la buena producción ofensiva se veía empañada por las concesiones en defensa. Sin descuidar el ataque, el entrenador entrante ha ido tapando poco a poco las vías de agua existentes hasta permitir al equipo aterrizar en Anoeta habiendo salvado una situación clasificatoria muy delicada, gracias a una versión mucho más sólida.
El posible once de la UD Las Palmas en Anoeta, con Herzog relevando al sancionado Álex Suárez, Jaime Mata haciendo lo propio con Fabio Silva (también suspendido) y Marvin en el lateral derecho por el lesionado Viti.
Las bajas con las que aterriza Las Palmas en Anoeta abren la puerta a un posible cambio de sistema. En su última visita a la Real, de hecho, el técnico Diego Martínez, dirigiendo entonces al Espanyol, ya apostó por variar a un 5-3-2 para defender a los txuri-urdin. Los análisis previos al encuentro, en cualquier caso, deben basarse en el estable comportamiento que ha venido teniendo el cuadro canario con su actual entrenador, dentro de un dibujo 4-2-3-1 matizable según las ubicaciones de sus centrocampistas y los momentos del juego.
Las Palmas atrae la presión del Barcelona en Montjuic combinado desde defensas y portero mediante un claro 4-2-3-1.
Las Palmas-Valladolid: el diferente escalonamiento de los tres centrocampistas amarillos genera, sólo con la posición más delantada de Essugo, un 4-3-3.
Movilidad ofensiva
El habitual comportamiento de Las Palmas en ataque, de cualquier modo, acostumbra a modificar los dibujos ya vistos, pues estamos hablando de un equipo muy asimétrico. En la banda derecha, el ex realista Sandro Ramírez es sinónimo de electricidad y de desmarques profundos. En la izquierda, mientras, el joven Molinero toma la línea de cal como mero punto de partida, para centrar constantemente su posición y sumarse así a zonas interiores.
Disposición muy clásica de Las Palmas: el lateral izquierdo Mika Mármol (flecha) asume toda la banda zurda, gracias a que Moleiro se incoprora a los carriles interiores para dibujar con los tres centrocampistas una especie de cuadrado.
Otro recurso habitual de los amarillos: el teórico extremo zurdo Moleiro y el mediapunta Javi Muñoz intercambian sus respectivas posiciones (flechas). Kirian tiene el balón y puede contemplar tanto la combinación en corto con Moleiro como un posible pase profundo a la carrera hacia fuera de Javi Muñoz.
Viendo jugar a los de Diego Martínez, se hace muy evidente lo ya comentado antes sobre los perfiles de sus extremos. Las Palmas hace de la banda de Moleiro, la izquierda, su lado fuerte: es ahí donde acumula pases y vuelca su juego en ataque. La derecha con Sandro, mientras, significa una vía mucho más directacircunstancia a la que contribuyen también las características verticales del lateral (Viti habitualmente y quizás Marvin en Anoeta).
Panorámica en la que se aprecia cómo Las Palmas junta muchos futbolistas en su parcela izquierda y vacía en mayor medida la derecha. En el ala diestra, Sandro se centra para estar más cerca del área en caso de centro y el lateral Viti se encarga de la profundidad por fuera.
No hacen ascos los canarios a tener la posesión del esférico y a juntar muchos pases, pero durante las últimas semanas han agregado a su juego registros más directos. A la hora de ejecutarlos, tal y como veíamos en la imagen previa del partido de Montjuic, Las Palmas atrae la presión de sus rivales combinando en área propiapara lanzar luego en largo al punta o también para intentar progresar con los centrocampistas si el adversario lo permite.
Las Palmas-Valladolid: los canarios vuelven a atraer la presión del rival, al dar salida al balón. Si en Montjuic lo pusieron en práctica mediante un 4-2-3-1, ante los pucelanos lo ejecutan con un 4-4-2 de medular en rombo a la que se incorpora Moleiro desde el extremo izquierdo.
Sin balón
Los patrones de Las Palmas se encuentran muy definidos, tanto en ataque como en defensa. El equipo de Diego Martínez está muy acostumbrado a dibujar sin balón un claro 4-4-2 que se dibuja mediante el cambio de ubicación de Javi Muñoz: pasa de la mediapunta a la primera línea para presionar en paralelo con el delantero centro.
Javi Muñoz avanza unos metros en Montjuic para presionar al Barcelona en paralelo junto al delantero Fabio Silva, dibujándose sobre el césped un claro 4-4-2.
Tan cierto es que Las Palmas ha mejorado en defensa con Diego Martínez como que las paradas de Jasper Cillessen han salvado al conjunto canario en más de una ocasión, durante los últimos partidos. El mencionado 4-4-2 defensivo de los amarillos, compacto tanto en fases de repliegue como de presión alta, significa una fortaleza y al mismo tiempo una debilidad, pues los adversarios vienen encontrando con cierta frecuencia la espalda del doble pivote. Para la Real puede resultar interesante imitar las fórmulas que han empleado los rivales de la UD a la hora de pisar con peligro el espacio en cuestión, apuntando la principal al movimiento hacia dentro de uno de los extremos.
Barcelona-Las Palmas: los dos centrocampistas del cuadro culé atraen la atención del doble pivote Campaña-Kirian, mientras Fermín López (círculo azul) se ubica a la espalda de ambos jugadores amarillos.
Barcelona-Las Palmas: Campaña y Kirian siguen condicionados por los dos pivotes del Barcelona. Raphinha (extremo metido dentro) y Fermín López (mediapunta), ambos en los círculos azules, van a recibir solos a la espalda del centro del campo canario.
Las Palmas-Valladolid: se repite una acción muy recurrente durante la jornada previa en Barcelona. Kirian y Esssugo se ven condicionados por los centrocampistas del Pucela, lo que aprovechan los castellanos para conectar por dentro con el movimiento interior del extremo Sylla (círculo morado).
Más allá de desajustes puntuales, gran parte del mérito del técnico Diego Martínez ha residido en dotar a la UD Las Palmas de cierta paciencia a la hora de defender. Los amarillos, pese al perfil técnico de sus futbolistas, son capaces de permitir largas secuencias de pase a sus rivales para salir luego al contragolpe tras robar el balón. El ya visto 4-4-2 singifica la formación de cabecera a la hora de contener a los adversarios y esperar el momento idóneo para recuperar el asférico y correr. Sin embargo, los canarios también son capaces de replegarse mediante un 5-3-2simplemente retrasando a uno de los extremos y convirtiéndolo en carrilero. No descartemos este último sistema contra la Real en Anoeta…
Sandro se retrasa en Montjuic hasta formar parte de la línea defensiva. El 4-4-2 con el que venía conteniendo a los culés la UD Las Palmas acaba de convertirse en 5-3-2.
Algo está haciendo bien Las Palmas para haber ganado siete partidos (incluidos dos de Copa) en menos de dos meses cuando antes no conocía la victoria desde el pasado febrero. La Real va tener enfrente en Anoeta a un rival complicado cuyas bajas suponen además, en clave txuri-urdin, un arma de doble filo. Merman al adversario, aunque al mismo tiempo le convierten en más imprevisible: determinados factores tácticos del fútbol de los canarios resultan muy marcados, pero quizás se vean modificados al faltar de golpe tres titulares habituales.