El BNS sorprendió el jueves al reducir su tipo de interés medio punto porcentual hasta el 0,50%, ante una economía lenta.
El banco nacional suizo, sin embargo, mantuvo sus previsiones de crecimiento económico del país, del 1% en 2024 y del 1,5% en 2025, y estimó que “debería recuperarse algo el próximo año, pero sólo débilmente debido a la moderada situación económica en el exterior”, afirmó. dijo en un comunicado de prensa.
“La incertidumbre sobre las perspectivas económicas ha aumentado en los últimos meses”, argumentó el BNS en el comunicado de prensa, en particular en lo que respecta a “la dirección futura de la política económica en Estados Unidos”.
“La incertidumbre política también ha aumentado en Europa. Además, las tensiones geopolíticas podrían debilitar la economía global”, añadió.
La institución monetaria suiza, por el contrario, rebajó sus previsiones de inflación para 2024 y 2025, pero las elevó ligeramente para 2026.
Ahora espera que sea del 1,1% en 2024 (en comparación con el 1,2% durante su anterior reunión trimestral en septiembre), del 0,3% en 2025 (en comparación con el 0,6% anterior) y del 0,8% en 2026 (en comparación con el 0,7% anterior).
El BNS también está dispuesto a “ser activo si es necesario en el mercado de divisas”, precisa.
En nuestro país, la inflación se sitúa por debajo del 2% desde junio de 2023, lo que permitió al BNS comenzar a flexibilizar su política monetaria ante el Banco Central Europeo y la Reserva Federal americana. En marzo de 2024, redujo su tasa clave en un 0,25% y luego realizó dos recortes de la misma magnitud en junio y septiembre.
La inflación en noviembre se situó en el 0,7% interanual, y muchos economistas esperan que caiga aún más con la caída esperada de los precios de la electricidad en enero.
La fortaleza del franco suizo había dado un impulso al BNS en sus esfuerzos por reducir la inflación, al aliviar la presión sobre los productos importados. Pero esta apreciación del franco suizo también tuvo un efecto desfavorable para las empresas suizas, ya que aumentó sus costos de exportación.
La apreciación del franco frente al euro pesa especialmente sobre las empresas industriales, un sector que ya se enfrenta a una caída de los pedidos de Alemania.
En el tercer trimestre, el crecimiento económico en Suiza se desaceleró hasta el 0,2%, frente al 0,4% del segundo trimestre, según cifras del Ministerio de Economía.