Juba Touabi, Media365, publicado el miércoles 11 de diciembre de 2024 a las 20:50 horas.
El Atlético de Madrid cerró a lo grande la fase de grupos de la Liga de Campeones con una contundente victoria por 3-1 sobre el Slovan Bratislava.
Liderados por un inspirado Antoine Griezmann y una joya de Julián Álvarez, los Colchoneros confirman su ascenso de poder antes de los octavos de final. Los de Diego Simeone tomaron el control desde los primeros minutos marcando el ritmo del partido. El primer destello vino de Julián Álvarez en el minuto 16: un suntuoso disparo curvado que dejó indefenso al portero Takac. El Atlético siguió presionando y, justo antes del descanso (42), Antoine Griezmann duplicó la ventaja con un duelo aéreo perfectamente concluido tras un preciso centro de Marcos Llorente. Al descanso, los madrileños dominaban lógicamente por 2-0.
Griezmann, la gran baza del Atlético
Al regresar del vestuario, el Slovan Bratislava revivió brevemente sus esperanzas gracias a un penalti transformado por Strelec (51º), tras una falta de Lenglet comunicada por el VAR. Pero el Atlético reaccionó de inmediato. Antoine Griezmann, a un preciso pase de Koke, marcó su segundo gol de la tarde en el minuto 57, con un disparo imparable tras un control perfecto.
El francés, cerca de hacer un hat-trick en el minuto 68 con una volea atrapada por Takac, demostró una vez más por qué sigue siendo uno de los pilares del Atlético. El Slovan, a pesar de algunos intentos esporádicos, nunca logró preocupar seriamente a una bien organizada defensa madridista.
Con este tercer éxito consecutivo en la Liga de Campeones, el Atlético sigue demostrando su fuerza goleadora. Antoine Griezmann, autor de 40 goles en la C1, ha vuelto a demostrar su importancia para el conjunto madridista. Su complicidad con Koke y Julián Álvarez fue uno de los puntos fuertes del encuentro. Por su parte, el Slovan Bratislava abandona la competición con la sensación de haber sido superado en un grupo complicado, pero puede aprender valiosas lecciones para el futuro.