El mediocampista nigeriano Wilfred Ndidi realizó una actuación virtuosa para el Leicester City en su contundente victoria por 3-1 sobre el West Ham en la Premier League en el King Power Stadium el martes.
La victoria marcó la primera para el nuevo entrenador Ruud van Nistelrooy y puso fin a una racha de seis partidos sin ganar para Leicester.
Fue una de sus mejores actuaciones esta temporada, caracterizada por la tenacidad, el talento ofensivo y la solidez defensiva.
Si bien algunos podrían atribuir la victoria al llamado “rebote gerencial”, los Fox mostraron una clara mejora en organización y ejecución.
Ndidi, desplegado en su rol preferido de mediocampo defensivo, jugó un papel decisivo a la hora de romper los ataques del West Ham y orquestar las transiciones del Leicester.
El regreso de Ndidi a sus raíces
La actuación de Ndidi contra el West Ham fue un claro recordatorio de las cualidades que alguna vez le valieron la reputación de ser uno de los mejores mediocampistas defensivos del mundo.
Después de haber sido utilizado en un rol más avanzado durante la campaña del campeonato del Leicester la temporada pasada, el internacional nigeriano parece rejuvenecido en su posición natural.
En la temporada 2022/23 de la Premier League, Ndidi jugó 27 partidos, registrando 61 tacleadas, 38 intercepciones, 42 despejes y 142 recuperaciones.
Estos números, aunque sólidos, representaron una disminución con respecto a sus años pico, ya que las lesiones y los ajustes tácticos pasaron factura.
La temporada pasada, en el Campeonato de EFL, los ex entrenadores Enzo Maresca y Steve Cooper optaron por empujar a Ndidi a un rol avanzado.
Respondió con cuatro goles y cinco asistencias en 32 apariciones, pero sus números defensivos se resintieron. Hizo sólo 39 tacleadas (22 menos que la temporada anterior), 25 intercepciones y 35 despejes.
Si bien sus contribuciones en ataque dieron frutos, dejaron vacíos notables en el mediocampo de Leicester.
La audición de Ndidi para Van Nistelrooy
El desempeño del martes demostró la diferencia que puede hacer un ajuste posicional.
En su papel defensivo más familiar esta temporada, Ndidi ya ha realizado 39 tacleadas, 30 despejes (el tercer mejor de la liga) y ocho intercepciones, lo que subraya su eficacia.
Contra el West Ham, el jugador de 27 años estuvo inmenso, ganando 10 de 13 duelos terrestres y cuatro de cinco batallas aéreas. Logró 11 despejes, lo que lo convirtió en el segundo mejor en esa categoría en toda la liga, y agregó tres intercepciones para coronar una exhibición casi perfecta.
Fue una actuación que no sólo levantó al equipo sino que también destacó el valor perdurable de Ndidi en su rol preferido.
El camino por delante para Ndidi y el Leicester City
El resurgimiento de Ndidi no podría haber llegado en mejor momento. Mientras los Foxes pretenden escalar puestos en la tabla y establecer consistencia, tener un jugador de su calibre anclando el mediocampo es crucial.
El martes por la noche acalló cualquier duda sobre su estado físico y su capacidad para sobresalir en un exigente rol defensivo.
Sus piernas, una vez cuestionadas, todavía tienen mucho que ofrecer, y su liderazgo en el campo es invaluable para un equipo en transición.
Si Ndidi continúa rindiendo a este nivel, no sólo podría solidificar su lugar en los planes de Van Nistelrooy sino también reafirmar su estatus como uno de los mediocampistas de élite de la Premier League.