FIGAROVOX/TRIBUNA – La censura gubernamental tendría consecuencias muy graves para la vida cotidiana de los franceses, para nuestra soberanía y para nuestra economía, advierte el presidente del Senado. Pide a los diputados que “empecen”.
Aquí están los diputados de la Nación afrontando sus responsabilidades.
¿Pondrán en peligro, con su voto, la vida cotidiana de nuestros conciudadanos, nuestra soberanía, nuestra economía y las reformas imprescindibles, por intereses estrictamente partidistas, base electoral o calendarios presidenciales?
¿Privarán a nuestro país de los presupuestos necesarios para garantizar nuestra protección social, financiar nuestra seguridad, nuestra defensa, nuestra educación, apoyar a nuestras autoridades locales, frenar la crisis inmobiliaria y proporcionar a los agricultores las tan esperadas medidas de apoyo?
¿Obstaculizarán la reconstrucción prometida a nuestros compatriotas de Nueva Caledonia, condición previa esencial para el retorno del diálogo en Nueva Caledonia?
¿Expondrán a nuestro país a la tormenta de los mercados financieros y a la desconfianza de los inversores?
¿Se interpondrán finalmente en el camino de la esencial recuperación nacional y del retorno de la credibilidad de Francia, uno de los pilares de la Unión Europea?
Pido a todos que se superen por Francia y que rechacen las consecuencias de la inestabilidad política y las incoherencias de un voto de censura.
Gerard Larcher
Michel Barnier ha demostrado valentía manteniendo el rumbo y ha trabajado estas últimas semanas, con determinación y responsabilidad, para restablecer las cuentas públicas y recuperar una trayectoria financiera creíble en aras del diálogo con el Parlamento.
Pudo contar con el apoyo del Senado durante toda la revisión del presupuesto. En nuestra diversidad, hemos tenido como horizonte los mejores intereses de Francia y de los franceses, debatiendo y votando los presupuestos que el país necesita.
Pido a todos que se superen por Francia y que rechacen las consecuencias de la inestabilidad política y las incoherencias de un voto de censura.
Todos conocemos la génesis de esta crisis, pero hoy hago un llamado a comenzar, a superar los cálculos políticos, la superación, el resentimiento y el deseo de venganza.
Pido un comienzo para demostrar que estamos a la altura de las responsabilidades que nos han confiado los franceses.
Pido un comienzo porque lo que está en juego es Francia.
¿Qué pasaría si finalmente mostráramos verdadero sentido republicano?