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El equipo está trabajando arduamente para estudiar las diferentes opciones, incluido el uso de su florete de repuesto para intentar ganar el Trofeo Julio Verne tan pronto como se presente una ventana climática favorable. “ Todavía tenemos la opción y la oportunidad de volver. Llegaríamos a Bretaña en unos tres días y, potencialmente, si no hay nada más roto en el barco, podríamos salir rápidamente, tan pronto como se presente una nueva ventana. », estima Gabart. Ya poseedor del récord de la vuelta al mundo en solitario, el regatista de Charente partió el sábado por la mañana para intentar batir el récord con tripulación que ostenta Francis Joyon (Idec) desde 2017 (40 días, 23 horas, 30 minutos y 30 segundos).