La censura contra el gobierno de Michel Barnier parece más cercana que nunca este domingo por la tarde, cuando la Agrupación Nacional afirmó que ya no hubo más discusiones con el ejecutivo sobre el presupuesto de la seguridad social que debe ser presentado el lunes a la Asamblea Nacional.
En un clima político cada vez más febril, el Primer Ministro “permanece abierto al diálogo como lo ha estado desde el principio”, afirmó su entorno.
Marine Le Pen, líder de los diputados RN, acababa de aumentar la presión con un cráneo adicional en vísperas de esta sesión parlamentaria decisiva.
“El Gobierno ha expresado su deseo de no modificar el PLFSS (proyecto de ley sobre la financiación de la seguridad social), es muy claro y hemos tomado nota de ello”, declaró Marine Le Pen a la AFP.
Se basó en unas declaraciones del ministro de Cuentas Públicas, Laurent Saint-Martin, al periódico Le Parisien publicadas el sábado por la tarde, en las que afirmaba que el texto ya no estaba sujeto a cambios.
“Volver” a este texto, fruto de un acuerdo en el seno de una comisión mixta que reúne a diputados y senadores, “sería sentarse en el Parlamento, la democracia y la deliberación cuyo compromiso respetamos”, justificó.
Un “comportamiento extremadamente cerrado y sectario”, declaró Marine Le Pen, sin precisar la censura del gobierno con la que su partido amenaza a Michel Barnier desde hace varias semanas.
El principal grupo político de la Asamblea Nacional, el partido de extrema derecha, puede derrocar al gobierno si apoya una moción de censura que la izquierda planea presentar si el Primer Ministro utiliza el artículo 49.3 de la Constitución.
La RN exigió nuevas concesiones al gobierno, en particular en el aumento de las pensiones de jubilación.
El ejecutivo puede modificar el texto hasta el último momento, es decir el lunes por la tarde. La Asamblea se reunirá a partir de las 15.00 horas.
“Línea roja absoluta”
La RN plantea “una línea roja absoluta”, afirmó el domingo uno de sus diputados, Jean-Philippe Tanguy, exigiendo que el Gobierno renuncie a la desindexación parcial de las pensiones en función de la inflación.
“Es un contrato social entre quienes han contribuido y el resto de la sociedad”, afirmó en el programa Preguntas Políticas de France Inter.
Después de haber obtenido que el gobierno abandone el aumento de los impuestos a la electricidad y haga una concesión sobre la Ayuda Médica Estatal (AME), la RN también quiere que se vuelva al desembolso de ciertos medicamentos.
El presupuesto de seguridad social, que la Asamblea deberá votar, está lleno de irritantes para la oposición, tanto de izquierda como de extrema derecha.
Sin mayoría, el Primer Ministro podría activar el artículo 49.3, que permite aprobar un texto sin votación. En ese caso, se vería expuesto a una moción de censura que podría examinarse el miércoles.
Si la izquierda y la Agrupación Nacional unen sus voces, el gobierno caerá. Esta sería la primera vez desde la caída del gobierno de Georges Pompidou en 1962.
La izquierda, por su parte, advirtió que votaría sin reparos a favor de la censura y denunciaría la dependencia del gobierno de la RN.
“Marine Le Pen muestra cada día a Michel Barnier de qué lado de la correa está. Los macronistas serán derrotados y deshonrados”, afirmó el domingo la líder ecologista Marine Tondelier.
Si el Primer Ministro decide no utilizar el 49,3 y el texto es rechazado, emprendería una nueva lanzadera parlamentaria.
La RN denuncia de antemano un escenario constitucional muy complejo que haría que el debate parlamentario se estancara y el Gobierno legislara mediante ordenanza, como puede hacerlo 50 días después de la presentación del texto.
Tres textos presupuestarios
Pilar del “barnierismo”, dominado por una alianza de centroderecha que apoya al gobierno, el Senado votó el domingo sin sorpresa a favor de toda la parte “ingresos” del presupuesto estatal.
Muestra de la tensión reinante, los senadores de izquierda abandonaron la cámara durante los debates, criticando un “golpe de fuerza” por parte del Gobierno y de la derecha senatorial, que pidió en el último momento un nuevo examen de varias decenas de medidas.
En total, el Parlamento está examinando actualmente tres textos presupuestarios: el presupuesto del Estado para 2025, el presupuesto de la Seguridad Social y el proyecto de ley de fin de gestión para el año en curso. En cada uno de ellos existe el riesgo de censura.
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