La presidenta de la Asamblea nacional, Yaël Braun-Pivet, declaró el martes que no considera una “catástrofe anunciada”, ante las amenazas de censura que pesan sobre el proyecto de presupuesto estatal para 2025.
“Escucho de todo y a menudo cualquier cosa (…) Nuestros textos están bien hechos, nuestra Constitución y nuestras reglas están ahí, por lo que no se predice ningún desastre, ningún +cierre+ al estilo estadounidense (…) No hay ningún escenario de desastre”, declaró la señora Braun-Pivet, invitada en Sud Radio.
“El gobierno puede presentar al Parlamento lo que se llama una ley especial para recaudar impuestos a partir del 1 de enero, puede haber renovación de gastos por decreto para poder pagar a los funcionarios, jubilados, etc. (…) No quiero preocupa a nuestros compatriotas. Tenemos una verdadera responsabilidad”, añadió.
Preguntada sobre las presiones que enfrenta el Primer Ministro Michel Barnier – Marine Le Pen por la extrema derecha y Mathilde Panot por la izquierda mantuvieron firmemente el lunes sus amenazas de censura al gobierno tras sus entrevistas con el inquilino de Matignon – Yaël Braun -Pivet considera que se trata más bien de “posiciones políticas”.
“El papel del Primer Ministro, cuando elabora un presupuesto, es tener en cuenta las expresiones de los parlamentarios electos de la nación que representa a los franceses. (…) Tenemos que tomar decisiones y eso es precisamente lo que le corresponde a él que tenga en cuenta las opiniones y expresiones políticas de todos.
Ante la intención de RN de votar a favor de la censura si el presupuesto queda “como está”, según Marine Le Pen, el presidente de la Asamblea Nacional recordó que la moción de censura es “un derecho constitucional que pertenece a los parlamentarios” y pidió a “todos ponerse en una posición constructiva para el bien de nuestro país”.
Además de la oposición, algunos aliados de Michel Barnier están aumentando la presión para limitar los aumentos de impuestos.
El jefe de los diputados macronistas, Gabriel Attal, recibido el martes por la mañana con los demás dirigentes de la “base común”, reiteró el lunes sus “dudas” al respecto, pero consideró a Marine Le Pen “totalmente irresponsable”, al margen de una viaje a Orne.