La Corte Penal Internacional (CPI) emitió este jueves 21 de noviembre órdenes de arresto sin precedentes contra el primer ministro Benjamín Netanyahu y su exministro de Defensa Yoav Gallant por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad. Las reacciones se han multiplicado desde entonces, y varios países dudan sobre qué hacer.
Este jueves 21 de noviembre se emitió una orden de arresto contra el primer ministro israelí por “crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra cometidos al menos desde el 8 de octubre de 2023”. Una decisión histórica adoptada por la Corte Penal Internacional, que provocó una ola de reacciones, principalmente en Europa y Estados Unidos.
Incluso dentro de los Estados miembros de la CPI existen dudas sobre el procedimiento a seguir y la posible aplicación de este mandato. Porque prácticamente Benjamín Netanyahu ya no puede viajar a los 124 países que han ratificado el Estatuto de Roma.
Este tratado internacional exige que los países cooperen con la Corte cuando sea necesario, incluso arrestando y trasladando a las personas acusadas. Pero en realidad nada obliga a los países miembros a respetar el tratado.
El último ejemplo: el de Mongolia, donde Vladimir Putin fue recibido en septiembre de 2024 a pesar de que se había emitido una orden de arresto por el “crimen de guerra de deportación ilegal” de niños.
• Estos países deberían arrestar a Netanyahu
Poco después de que se emitieran las órdenes de arresto contra el Primer Ministro israelí, las reacciones internacionales se multiplicaron. La Autoridad Palestina y Hamás celebraron la decisión, sin mencionar la orden emitida simultáneamente contra el jefe del brazo armado del movimiento islamista palestino.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, afirmó que las órdenes de detención deben ser “respetadas y aplicadas”.
“La decisión del tribunal debe ser respetada y aplicada”, afirmó Josep Borrell durante una rueda de prensa en Ammán junto a su homólogo jordano, Aymane Safadi.
En Europa, varios países han apoyado a la Corte Penal Internacional. “España cumplirá con sus compromisos y obligaciones según el Estatuto de Roma y el derecho internacional”, dijeron fuentes oficiales a la Agence France Presse.
El gobierno irlandés dijo en un comunicado que “apoya firmemente a la CPI” y pide “a todos los Estados que respeten su independencia e imparcialidad, absteniéndose de cualquier intento de debilitar a la Corte”. Los Países Bajos se están preparando para ejecutar las órdenes de detención, afirmó también el Ministro de Asuntos Exteriores holandés.
• Estos países no están seguros de arrestar a Netanyahu
Sin embargo, dentro de la Unión Europea se escuchan varias voces sobre un posible arresto de Benjamin Netanyahu.
El ministro de Defensa italiano, Guido Crosetto, dijo que Italia se vería obligada a arrestar al primer ministro israelí o a su ex ministro si visita el país, tras las órdenes de arresto emitidas por la CPI. Antonio Tajani, ministro de Asuntos Exteriores, se mostró más cauteloso: “Evaluaremos con nuestros aliados cómo reaccionar e interpretar esta decisión”.
La línea también es incierta en el lado francés. Durante la rueda de prensa celebrada este jueves en el Quai d’Orsay, el portavoz Christophe Lemoine recordó la importancia de la CPI, pero consideró que la detención de Benjamin Netanyahu es “un punto jurídicamente complejo”.
• Estos países no quieren arrestar a Netanyahu
En cambio, en Austria, el ministro de Asuntos Exteriores, Alexander Schallenberg, dijo que las órdenes de arresto eran “incomprensibles”. “Parece absurdo poner al mismo nivel a los miembros de un gobierno elegido democráticamente y al líder de una organización terrorista”, reaccionó, añadiendo que esta decisión, según él, socava la credibilidad del Tribunal.
“Esta decisión es una vergüenza para el sistema jurídico internacional”, reaccionó también el jefe de la diplomacia húngara, Peter Szijjarto, calificándola de “inaceptable” y “absurda”.
Otros países -no miembros de la Unión Europea- también han apoyado a Benjamin Netanyahu o podrían hacerlo y, por tanto, no deberían arrestarlo si visita su territorio. Este es el caso de Argentina. La oficina del presidente Javier Milei cree que estas órdenes de arresto de la CPI “ignoran el legítimo derecho de Israel a defenderse frente a los constantes ataques de organizaciones terroristas”.
El principal aliado de Israel, “Estados Unidos rechaza categóricamente la decisión de la Corte (Criminal Internacional) de emitir órdenes de arresto contra altos funcionarios israelíes”, reaccionó un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. Joe Biden consideró esta decisión “escandalosa”.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificó de “decisión antisemita” la emisión por parte de la CPI de una orden de arresto internacional contra él y su ex ministro de Defensa, Yoav Gallant, considerándose víctima de un nuevo “juicio Dreyfus”. Yoav Gallant denunció un “precedente peligroso” que “alienta el terrorismo”.
Ni Estados Unidos ni Israel son miembros de la CPI, un tribunal permanente encargado de procesar y juzgar a personas acusadas de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra.
Fundada en 2002, esta institución, que hoy cuenta con 124 Estados miembros, sólo ha emitido un puñado de condenas desde su creación.