Las regiones y ciudades del norte de Marruecos enfrentan una creciente preocupación debido a que las inundaciones y las alteraciones climáticas afectan actualmente al sur de España, un vecino geográfico inmediato. Las torrenciales lluvias caídas sobre Málaga han reavivado los temores de un escenario de catástrofe similar a la tragedia ocurrida hace dos semanas en Valencia. Esta devastadora tormenta costó la vida a 223 personas, incluidos marroquíes.
Según información obtenida por Hespresslas autoridades marroquíes siguen de cerca esta inestabilidad meteorológica en España. Se están tomando medidas preventivas para anticipar cualquier posible movimiento de la tormenta hacia el norte de Marruecos.
Mounir Laymouri, alcalde de Tánger, la ciudad más grande del norte del país, detalló los preparativos en marcha. “ Una comisión de seguimiento, que reúne al municipio, la wilaya y la empresa delegada Amendis, se moviliza las 24 horas del día para garantizar el mantenimiento de las tuberías y las redes de evacuación. “, dijo. Agregó que “ Todos los conductores de maquinaria pesada, en particular bulldozers, están en alerta para intervenir en caso de emergencia. ».
Aunque estas medidas están vinculadas principalmente a las fluctuaciones climáticas locales, Laymouri no dejó de subrayar su importancia en el contexto actual. “ Hemos recibido alertas de las autoridades competentes indicando fuertes lluvias este fin de semana, lo que demuestra la gravedad de la situación. “, aclaró. En un arrebato de esperanza, concluyó: “ Oramos para que la lluvia sea de bendición. ».
Los habitantes del norte de Marruecos, especialmente sensibles a la situación, siguen de cerca los acontecimientos que tienen lugar en España. Sus temores se ven exacerbados por la gravedad de las inundaciones, que han causado grandes pérdidas humanas y materiales, pero también por los estrechos vínculos con las regiones españolas afectadas, donde reside una importante comunidad marroquí.
La Agencia Meteorológica Nacional de España emitió este miércoles alerta roja para Málaga y Tarragona, informando de un fenómeno atmosférico conocido como ” gota fría “. Esta depresión aislada en altitud provoca lluvias torrenciales repentinas, especialmente frecuentes en otoño en las zonas costeras cercanas a Marruecos.
Las previsiones meteorológicas españolas prevén entre 120 y 180 litros de lluvia por metro cuadrado al final de las precipitaciones de este jueves, intensificando la ansiedad de los marroquíes que viven cerca. Este fenómeno meteorológico, a menudo temido, ilustra los efectos impredecibles del cambio climático en una región que ya es vulnerable.
Si bien el norte de Marruecos sigue a salvo por el momento, esta situación pone de relieve la importancia de la preparación y la cooperación regional ante los desafíos climáticos. Tanto para los residentes como para las autoridades, ha llegado el momento de la vigilancia y de la esperanza de una rápida calma de estos disturbios.