Durante este encuentro, bajo el tema: “Marruecos-Francia: construir juntos un futuro común en un mundo en transición”, Sitail subrayó la determinación de los dos países de acelerar y reinventar su asociación excepcional, llevada a la cumbre más alta de la Estado por Su Majestad el Rey Mohammed VI y el Presidente francés Emmanuel Macron.
“De este deseo de altísimo nivel surge el establecimiento de una serie de canales que hoy consisten en identificar los caminos y los temas de los que se parte en lo sucesivo esta asociación excepcional, renovada entre los dos países », subrayó Sitail frente a un público compuesto por personalidades de diversos orígenes, entre ellos diplomáticos, periodistas, agentes económicos, cargos electos y miembros de la comunidad marroquí residente en Francia.
El diplomático acogió con especial satisfacción la nueva posición de Francia sobre la cuestión nacional, que refuerza la dinámica internacional y el enorme impulso de apoyo a la soberanía del Reino sobre su Sáhara.
Para Sitail, “la reconstrucción” de la asociación franco-marroquí es necesaria por el bien y los intereses de los dos países “en un contexto geopolítico cambiante, en el que las cartas se están redistribuyendo, en particular con la aparición de nuevas potencias”. .
Esta “recoconstrucción” está llamada también a formar parte de una perspectiva continental, la del desarrollo de África “plural”, y debe aprovechar en particular la relación histórica entre los dos países, según el embajador Sitail, recordando los dos puntos clave momentos que han forjado su asociación excepcional: “hermandad de armas” con una Francia que celebra este año el 80° aniversario del desembarco y de la Liberación; e “Independencia de Marruecos” (1956) con la decisión de ambos países de mirar hacia el futuro.
Esta misma mirada hacia el futuro debe regir, según ella, las futuras relaciones bilaterales para enriquecer y acelerar esta asociación en sus diferentes aspectos: religioso, económico, de seguridad, etc.
Apoyándose en cifras, Sitail destacó los puntos fuertes de la cooperación actual que se pueden aprovechar en esta perspectiva, citando a nivel cultural la importante red de enseñanza francesa desplegada en Marruecos o los 53.000 estudiantes marroquíes presentes en Francia, que hacen del Reino “uno de los los principales contribuyentes a la influencia de la educación superior francesa”.
Y añadió que “con 17 consulados, tenemos una diáspora de 1,6 millones de marroquíes, que sirven de vínculo entre las dos culturas y de palanca del poder blando marroquí en Francia”.
A nivel económico y comercial, Francia es el tercer proveedor y el segundo cliente de Marruecos, donde el stock de IED francesa representa más de 8 mil millones de euros, señala el embajador, quien también menciona la presencia sobre el terreno marroquí de un millar de empresas francesas. incluyendo prácticamente todos los del CAC 40.
Por su parte, Marruecos es el primer inversor africano en Francia, señaló Sitail, quien aprovechó la ocasión para subrayar también la ejemplar cooperación en materia de seguridad del Reino con Francia, en particular en la lucha contra el terrorismo, el crimen organizado y la inmigración ilegal.
En su intervención en la inauguración de este encuentro, el alcalde de Neuilly-sur-Seine, Jean-Christophe Fromantin, que coorganizó este encuentro con el Círculo Internacional de Neuilly, se mostró encantado de recibir a Marruecos para hablar del futuro prometedor de su relaciones con Francia.
“La densidad de las relaciones entre Francia y Marruecos debe aprovecharse al máximo para el bien de nuestras poblaciones y la prosperidad de los dos países”, afirmó en una declaración a la MAP al final de la conferencia de Sitail, que fue seguido de un rico intercambio con los asistentes sobre las perspectivas de cooperación entre Marruecos y Francia.