El presidente francés, Emmanuel Macron, destacó los valores compartidos del mundo francófono en la 19ª cumbre de la Francofonía, que se inauguró en el castillo de Villers-Cotterêts, a unos 80 kilómetros al noreste de París.
Ante más de 80 delegaciones estatales y gubernamentales, el presidente francés abordó cuestiones cruciales como la protección de la soberanía de Ucrania frente a la agresión rusa y la necesidad de una solución al conflicto israelí-palestino, basada en la coexistencia de dos Estados.
Macron también insistió en la importancia de proteger y ayudar a las poblaciones civiles, tanto en el mundo francófono como fuera de él.
Este evento, que se celebra cada dos años, no es organizado por Francia desde hace 33 años y debería atraer a muchos líderes africanos. La cumbre continuará hasta el 5 de octubre en el Grand Palais de París.
El tema de este año es “Crear, innovar y emprender en francés”, pero los debates también se centrarán en cuestiones urgentes, como la crisis en Oriente Medio y los conflictos armados en África, durante reuniones a puerta cerrada.