Los Guingampais fueron derrotados contundentemente por los Clermontois este sábado 5 de octubre (4-1), durante la 8ª jornada de la Ligue 2. Sobre el césped del estadio Gabriel-Montpied, los hombres de Sylvain Ripoll se vieron desbordados en determinadas acciones y carecieron de realismo. El técnico del En Avant Guingamp ofrece su análisis.
¿Cuál es su primer sentimiento después de esta dura derrota?
Encajar cuatro goles me da espinillas y me pica, así es. En el primer cuarto de hora encajamos dos goles, aunque durante ocho o diez minutos ya estábamos bastante avanzados en el partido. Pero en la primera incursión en un córner encajamos un gol… Después, fue un poco como el escenario del partido. Creamos muchos centros, muchos tiros, muchas ocasiones. Enfrente hay un portero que está haciendo un gran partido, enhorabuena.
“Clermont fue clínico, nosotros no”
Este partido se decidió por la eficiencia.
Tengo la impresión de que cada vez que los Clermontois llegaban a nuestros 30 metros, casi marcaban. Entonces crea frustración, pero también manifiesta un desequilibrio. En el juego conseguimos desequilibrar a nuestro rival y crear situaciones. Pero creo que la diferencia este sábado estuvo en la efectividad en las zonas de la verdad. Donde nosotros, a pesar de muchas situaciones, no fuimos efectivos. Y donde Clermont, con poco, fue clínico.
La cantidad de tiros (23 a 9), centros (14 a 2), ¿qué te inspira?
Creo que eso resume el partido. Y obviamente te duele la cabeza porque no queríamos que este partido fuera así. Tendremos que digerirlo.
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Da la impresión de que este equipo no necesariamente aprende de sus errores. Especialmente al inicio del partido, es la cuarta vez que encajas un gol en los primeros 10 minutos.
Sí, no puedo decirte lo contrario. Es la cuarta vez que encajamos un gol en los primeros diez minutos. Pero con el 2-0 (minuto 15), el partido está lejos de terminar dadas las situaciones de peligro que fuimos capaces de crear. Después, también nos vemos obligados a desequilibrarnos más de lo necesario porque estamos atrasados. Tenemos la impresión de que de momento el adversario, con pocas cosas, es capaz de hacer mucho…
En tu cabeza, ¿es un partido para olvidar, o por el contrario, sobre todo no olvidarlo para no repetirlo?
Esta es una combinación que debe usarse. Es cierto que las victorias traen mucha más alegría. Pero ciertas derrotas, cuando las analizas bien, también pueden permitirte aprender lecciones positivas para el futuro. Ahora bien, esta no es la primera vez que esto sucede. Entonces tenemos que tener cuidado. Después debemos ser conscientes de nuestras carencias y de esa fragilidad defensiva que nos penaliza. Esta noche tampoco hemos sido efectivos. Entonces cuando pones uno y el otro, queda 4-1.