Sospechosa de haber organizado la quiebra de su empresa de corretaje de seguros, Magali Berdah compareció ante el tribunal este lunes 30 de septiembre. La fiscalía solicitó pena de prisión en su contra.
La fiscalía solicitó 18 meses de prisión, seis de los cuales encerrados bajo un brazalete electrónico, contra Magali Berdah, ex “papisa de los influencers”, juzgada este lunes 30 de septiembre en Niza por quiebra cuando era corredora de seguros hace unos diez años.
Su juicio comenzó a las 14:30 horas, se escuchó a todas las partes hasta las 23:10 horas. La decisión se tomará el 25 de noviembre.
Más de 80.000 euros sustraídos en efectivo sin justificación
El caso se refiere a la sociedad de corretaje BA&CO, creada en 2013 por un amigo de la infancia de Magali Berdah, adquirida en marzo de 2014 por la madre de esta figura del mundo de las redes sociales y luego sometida a liquidación forzosa en 2015, con un pasivo estimado en casi 2,5 millones de euros.
Si Magali Berdah se presentó como una simple empleada encargada de las ventas en BA&CO, la fiscalía consideró que ella era la gerente de facto.
“Ella parece ser el personaje central de esta empresa. Ella se defiende, pero todas las pruebas convergen”, insistió la fiscal Sylvie Maillard, solicitando también la prohibición definitiva de gestionar una empresa.
Procesada junto con ella, la amiga de la infancia de Magali Berdah se negó a responder a las preguntas, mientras que su madre, ausente de la audiencia por motivos de salud, sólo dio respuestas vagas durante la investigación. La fiscalía solicitó una pena de prisión suspendida contra ellos.
Entre 2014 y 2015, la muy vaga contabilidad de BA&CO indica que más de 80.000 euros se tomaron en efectivo sin justificación, mientras que 600.000 euros pasaron a través de una cuenta abierta a nombre de una secretaria para pagar salarios cuando los activos de la empresa corrían riesgo de sufrir daños. congelarse a petición de los acreedores.
27.000 euros de gasto en lujo
Pero esta cuenta también presenta gastos de lujo (hoteles en Mónaco, ropa, bombones, etc.) por un total de 27.000 euros que nadie ha explicado.
Magali Berdah, muy combativa ante los jueces, reconoció sin embargo una cierta permeabilidad entre sus finanzas personales y la cuenta de la secretaria: recibía pagos por su trabajo y también recargaba la cuenta con fondos que le habían prestado en 2015.
En 2019, también fue condenada por abuso de debilidad por haber pedido prestado estos fondos a un hombre que padecía la enfermedad de Alzheimer, aunque afirma haberlo devuelto todo, incluidos los intereses. Un caso que ha llevado a los investigadores a interesarse recientemente por BA&CO.
“De la noche a la mañana nos despertamos diciendo que era Magali Berdah quien había hecho todo”, denunció la influencer.
Todos los abogados defensores pidieron la absolución; los de Magali Berdah criticaron una investigación tardía y no concluyente, según ellos. “Este expediente huele a desván”, se burló Franck De Vita. “Si no existe Magali Berdah, no hay procesamiento y no hay juicio (…) Debemos tenerla, y ella es la única que es solvente”, afirmó.
Magali Berdah insistió en las veinte empresas que dirigió en su nombre durante su vida: todas fueron liquidadas “bien” según ella -con un pasivo de 350.000 euros, sin embargo, recordó el fiscal-, mientras que la agencia Shauna Events, creada en 2017 y especializada en conectar marcas e influencers, hizo fortuna.
Sin embargo, experimentó un “descenso a los infiernos” en 2022, cuando el rapero Booba comenzó a acusarla de prácticas comerciales engañosas. La investigación contra ella fue desestimada, mientras que Booba fue acusada de acoso moral en línea agravado y 28 internautas fueron condenados en marzo.
La sentencia quedó reservada hasta el 25 de noviembre.