Al frente del diseño de Mercedes-Benz durante 24 años, Bruno Sacco nos dejó el pasado 19 de septiembre. El italiano que dedicó 41 años a la firma estrella fue el artífice de su renovación y dejará logros emblemáticos en la historia.
El gran público no necesariamente conoce su nombre, pero Bruno Sacco – que nos dejó el 19 de septiembre (pero la desastrosa noticia no se hizo pública hasta el día 28) – estuvo al frente de 1975 a 1999 al frente del estilo Mercedes, que lo transformó en profundidad y lo impregnó de cierta modernidad.
El italiano, nacido en Udine en 1933, pensó muy pronto en seguir la carrera de diseñador. Estudió en la Escuela Politécnica de Turín, luego aprendió sus habilidades primero en Ghia y luego en Pinin Farina. antes de hacer realidad su sueño, trabajó en Mercedes-Benz, donde se incorporó en 1958 y al que luego fue fiel durante toda su carrera profesional.
Vehículos de seguridad y experimentales también en su bolso.
Curioso y experto en todos los oficios, tiene varios hilos en su arco. Durante la década de 1960 también se interesó por la seguridad y los vehículos experimentales desarrollando los prototipos C111 y C111-II caracterizados por su motor rotativo Wankel. Su primera producción a gran escala fue el Mercedes W123 lanzado en 1976, un primer hito lleno de clasicismo y robustez. Luego, su primer modelo verdaderamente emblemático fue el Mercedes Clase S tipo W126, al igual que su elegante versión cupé, el 560 SEC, el buque insignia de la gama lanzado a principios de los años 1980.
Será el artífice de la ampliación de gama hacia abajo con el modelo del que estaba más orgulloso, el 190 (tipo W201) antes de continuar con el Clase A.. Bruno Sacco fue el defensor de una expansión total, una estrategia impuesta por una dirección que buscaba la máxima rentabilidad, caracterizada por el SLK roadster con techo rígido retráctil pero también por el CLK con su aspecto característico.
W140: la clase S paquidérmica
El único obstáculo en un viaje casi impecable, reconoce el propio Bruno Sacco, es el imponente Mercedes Classe tipo W140 lanzado en 1991, al que se le impuso un tamaño “gigantesco” para seducir a una América que no podía vestir con proporciones elegantes. Se tomaría revancha con la siguiente generación, el W220, que inició su andadura en 1998. La última obra que dejó en el catálogo de la marca estrella fue el Mercedes SL R230, aparecido en 2001.
Publicado el 30/09/2024 a las 14:30