Hace unos años, Kaley Cuoco, la estrella de La teoría del Big BangTuvo que tomar una decisión difícil para su familia. Una decisión que la afectó mucho, según confesó recientemente.
Cuando no está en los sets de filmación, especialmente en su nueva serie Basado en una historia real – Kaley Cuoco dirige una empresa de productos para perros. Pero su amor por los animales a veces se puso a prueba. El 25 de noviembre, la actriz, a quien descubrimos a principios de los años 2000 en La teoría del Big Bangcompartió una desgarradora anécdota en su cuenta de Instagram. Mientras sus fanáticos se preguntaban desde hacía algún tiempo dónde había ido su perra Shirley, Kaley Cuoco quiso ser transparente sobre el “decisión insostenible” que tuvo que aceptar por el bien de su familia. “El amor de mi vida Tom.que es un gran amante de los perros, se mudó conmigo desde todo el país con su guapísimo pastor alemán, Blue. Desafortunadamente, hace dos años, Blue y Shirley comenzaron a pelear muy violentamente”. explicó la estrella.
“No quería que sucediera una tragedia”: Kaley Cuoco tuvo que tomar una difícil decisión
Kaley Cuoco continuó con gran pesar y explicó que Shirley, a quien adoptó hace casi 15 años con solo seis semanas de edad, era “decidido a matar” Azul. “Fue aterrador. Ella había peleado con otros perros antes, el único con el que no peleó fue Norman. [l’autre chien de l’actrice, décédé en 2021].” Dado su comportamiento peligroso, Kaley Cuoco tomó la decisión de dejar que Shirley se fuera a vivir a otro lugar. “No quería que sucediera una tragedia o que alguien estuviera allí y saliera lastimado”.se justificó Kaley Cuoco. Para separar a los dos perros, la actriz y su prometido encontraron una solución: Shirley se fue a vivir con Tony, el adiestrador de perros de Kaley Cuoco, quien ya la conocía muy bien.
El perro de Kaley Cuoco murió de cáncer
Algún tiempo después, Shirley murió de cáncer de huesos. “La querían mucho”aseguró Kaley Cuoco, quien no se arrepiente de esta difícil decisión ya que había que tomarla. “Por la seguridad de Shirley”. “No quería que terminara en un hogar que no la entendía porque era muy especial y la había tenido durante tanto tiempo”. Con esta solución, Kaley Cuoco pudo seguir viendo a Shirley, en ausencia de los otros perros, y ser testigo de su felicidad antes de que el perro muriera a los 14 años.
Artículo escrito en colaboración con 6Médias.