Robbie Williams ha expresado su decepción por poder pasear por Londres sin ser reconocido.
El cantante de 50 años, que disfrutó de un gran éxito como miembro de la banda Take That y como solista, ha vendido más de 75 millones de discos en todo el mundo. Sin embargo, su gloria parece estar desvaneciéndose. Paseando por Hyde Park, en la capital británica, el pasado domingo, sin ser reconocido, Robbie Williams cuestionó su condición de estrella.
Su esposa Ayda Field filmó al cantante, visiblemente descontento, mientras regresaban juntos de un restaurante. Robbie Williams se quejó: “Es muy preocupante. Caminamos de regreso por Hyde Park. Estoy vestida enteramente de rosa. Tengo zapatillas rosas. Tengo gafas de sol de diamantes y absolutamente nadie me reconoció ni me molestó”, lamentó. Honestamente confesó: “No era así en los años 90”.
Ayda Field siguió filmando a la estrella tumbada en el césped, saludando a los transeúntes, pero el público seguía sin reconocerle. Herido en su ego pero manteniendo su sentido del humor, Robbie Williams no ha renunciado a querer ser reconocido en la calle. El martes 25 de junio, los dos cónyuges salieron a las calles de Kensington para ver si algún fan lo reconocía. Esta vez, el cantante de “Let Me Entertain You” lució un chaleco con su nombre estampado en la espalda. Buenas noticias: ¡la gente sabe leer! Por eso, Robbie Williams estaba encantado de ver a sus fans haciendo cola para pedirle selfies. Ayda Field compartió las imágenes en Instagram.
Y pensar que algunos artistas se quejan de su fama y llegan incluso a pelearse con los paparazzi.
