La esperada secuela de “Gladiator” acaba de estrenarse y su director, Ridley Scott, ya ha anunciado que está trabajando en una tercera parte, veinticuatro años después del estreno de la primera, coronada con cinco premios Oscar.
“Gladiator II” está en las pantallas francófonas desde el miércoles 13 de noviembre y llega este viernes a Estados Unidos con el protagonista Paul Mescal, actor irlandés revelado en la serie “Gente normal”, en el papel de Lucius, hijo de Maximus (Russell Crowe), Gladiador de la primera película, Oscar a mejor película y mejor actor.
La superproducción, con su trama sangrienta y alimentada por la sed de venganza del héroe, ha cosechado críticas relativamente buenas y ya ha acumulado 87 millones de dólares en ingresos de taquilla en los países donde ya se estrenó la semana pasada.
“Teniendo en cuenta las actuaciones en el resto del mundo desde ayer, definitivamente habrá Gladiator III”, dijo Ridley Scott durante el estreno americano el lunes en Los Ángeles.
“Como también se vuelve financiero, sería una locura no considerar una tercera versión”, añadió el director británico, aclamado por “Blade Runner” o “Thelma y Louise”.
El guión de la segunda parte estaba “previsto para dejar mucho espacio a la posibilidad de una secuela”, explica el cineasta que, con casi 87 años, ha realizado 18 películas desde el estreno en 2000 de la primera “Gladiator”.
“Los mismos errores”
Exiliado en Numidia (norte de África), Lucius es hecho prisionero de guerra y a su vez se convierte en gladiador después de que el ejército romano, liderado por el general Marco Acacio (Pedro Pascal), invade su tierra de adopción.
Seducido por su ira, Macrinus (Denzel Washington – en la lista de potenciales ganadores del Oscar), un antiguo esclavo hambriento de poder, le hace luchar en Roma, en una trama muy similar a la del primer “Gladiador”, que la película constantemente ecos.
“Joyas, sandalias, etc. Parezco un proxeneta romano (…) No tenía suficiente espacio en mis manos para los anillos”, bromeó Denzel Washington el lunes en la alfombra roja.
Paul Mescal se mostró entusiasmado con la posibilidad de protagonizar una tercera película, indicando que Ridley Scott había discutido una nueva dirección para la trama que no “simplemente la traería de regreso a la arena como la hemos visto” hasta ahora.
“La última vez que hablé con Ridley Scott, tenía 9 páginas. Ayer dijo que tenía 14 años”, dijo el actor a los periodistas.
“Me encantaría que esto entrara en una esfera más política”, con Lucius arrojado al pozo de las intrigas judiciales de las que intentaría escapar, como Michael Corleone en “El Padrino”, añadió.
Preguntado por las diferencias entre la primera y la segunda entrega en la forma en que abordan las cuestiones de poder y política, el director no ocultó sus intenciones: “Es exactamente lo mismo”.
“Un hombre muy rico cree que puede simplemente tomar las riendas del imperio… ¿Eso significa algo para usted?” preguntó, menos de dos semanas después de la elección del multimillonario republicano Donald Trump a la Casa Blanca.
“No aprendemos nada de la historia. Simplemente estamos repitiendo los mismos errores. Estamos viviendo lo mismo en varios lugares del planeta en estos momentos.