A Sylvain Prudhomme le gusta viajar y, en el camino, capturar retratos y fragmentos de palabras que convierte en su literatura. Nacido en Francia, pasó su infancia en diferentes países africanos, en Camerún, Burundi, Níger, Mauricio, antes de venir a estudiar Letras a París y luego dirigir la Alianza de 2010 a 2012. Franco-Senegalés de Ziguinchor, Senegal.
hijo romano por los caminos (Gallimard), publicado en 2019 y galardonado con el Premio Landerneau y el Femina, ya nos ofrecía una travesía atípica de Francia a través de la figura de un autoestopista, esa curiosidad por la multitud de existencias posibles nos empujó a recorrer las carreteras departamentales para encontrar personas y tocar por un momento la verdad de sus vidas. Luego publicó en 2021. Tormentas (Gallimard), entonces El niño en el taxi en 2023 (Medianoche), otra historia de coches, que le valió ser finalista del Premio de los Libreros 2024.
Su última novela publicada en octubre por Editions de Minuit, “Coyote”, narra un viaje de 2.500 kilómetros haciendo autostop a lo largo de la frontera mexicana.construido a lo largo de los añosencuentros que tuvo y las conversaciones que intercambió en esta ocasión con automovilistas, mujeres y hombres comunes y corrientes, que encarnan esta región fronteriza y liminal“.
Más que una historia de viaje en primera persona, sitúa las palabras de los automovilistas en el centro y busca reflejar la oralidad de las personas que le hablan: lo que tienen que decir en su territorio, al día siguiente de la elección de Donald Trump, en esta frontera con múltiples temas y poder simbólico que resonó en todos los discursos de la campaña presidencial, pero especialmente sobre ellos. Porque para Sylvain Prudhomme precisamente “lo más interesante es cuando divagan, cuando empiezan a hablar de cosas muy íntimas, y son todos esos apartes, todos esos momentos imprevistos donde estamos en la sensación y en la emoción los que hacen que entendamos mucho mejor lo que están pasando.“.
« ¡Ay Silvano!
Mira estos colores en el desierto.
Mira que bonito es.
Tenemos la puesta de sol para nosotros solos.
¿Quieres que te diga mi opinión?
Tuvimos suerte de nacer en esta vida.
¿ Qué dices de la vida : bonita, no ?
Es bonito pero es corto, hay que vivirlo bien.
Suavemente.
Suavemente.
Con arte. »
Con la luz, con el color de su libro, Sylvain Prudhomme quiso asociar otras imágenes, las de los documentales de la cineasta Stéphanie Barbey, a quien invitó a compartir su gran taller. Nacida en 1972 en Ginebra, Suiza, Stéphanie Barbey tiene una maestría de la London School of Economics and Political Sciences. Estudió cine documental en Ateliers Varan, París. Desde 2006 es asociada de Intermezzo Films y trabaja como directora de documentales para cine y televisión.
Trabaja también en Estados Unidos, país que filma en particular en el documental Broken Land, estrenado en 2014 y codirigido con Luc Peter; sobre los estadounidenses blancos que viven en la frontera con México en una obsesión paranoica con los inmigrantes ilegales“paradójicamente ausente de todas las imágenes” explica Sylvain Prudhomme. No están ahí pero están en todas partes.
El último documental de Stéphanie Barbey estrenado en 2023 se titula soñadores, apodo dado a los inmigrantes indocumentados que llegaron siendo niños a los Estados Unidos desde el proyecto de ley DREAM (Desarrollo, Ayuda y Educación para Menores Extranjeros) destinado a regularizarlos, presentado en 2001 y aún pendiente de aprobación por el Congreso. Los menores de edad, no se consideran responsables de su llegada al territorio y, por tanto, están protegidos. Como adultos, su realidad se transforma en clandestinidad y su presencia se vuelve ilegal.
Reportaje :
Hoy, el informe de Vincent Josse nos lleva al norte, a Cateau-Cambrésis, con motivo de la reapertura del Museo departamental Henri Matisse, del que Sophie Le Flamanc es directora adjunta. Después de 18 meses de cierre por obras, el museo reabre sus puertas y amplía sus espacios expositivos, repensando el recorrido y la escenografía en torno a la obra de Henri Matisse. Fue el propio artista quien decidió antes de morir donar 82 obras al museo que creó en 1952 en su ciudad natal de Cateau-Cambrésis. Hoy en día, la colección del museo ofrece un amplio panorama, tanto desde el punto de vista temporal como de las técnicas utilizadas, de lo que Henri Matisse fue capaz de realizar a lo largo de su vida: pinturas, esculturas, grabados, papeles pegados, gouaches recortados, vidrieras. vidrieras, objetos litúrgicos, trajes, tapices… Sophie Le Flamanc subraya hasta qué punto Henri Matisse probó todas las formas del arte. El Museo Departamental Henri Matisse Le Cateau-Cambrésis será gratuito durante la primera semana de reapertura, del 23 de noviembre al 1 de diciembre. La oportunidad de descubrir también la exposición temporal “Cómo hice mis libros” que destaca los libros ilustrados de Matisse hasta el 13 de abril de 2025.
Consejos culturales:
- Stéphanie Barbey recomienda encarecidamente la lectura del último libro de Gabriella Zalapì “Ilaria o la conquista de la desobediencia” publicado por ZOE.
- Sylvain Prudhomme eligió una colección de cuentos que le acompaña desde hace mucho tiempo, “Manual para amas de casa”, de Lucía Berlíntraducido por Valérie Malfoy.
Programación musical:
- la cura, una cosa frágil (2024)
- Albin de la Simone, el escape (2013)
- Júnior, mediterráneo (2024)