Feliz aquel que, como Hammadi, ha hecho este hermoso viaje… Con sus compañeros Hamtoudo y Dembourou, es el héroe de Kaidaray cuento fulani que se transmitía oralmente de una generación a otra en las familias africanodesde los jóvenes hasta los mayores, junto al fuego. En esta historia iniciática, Hammadi, Hamtoudo y Dembourou viajarán “en la tierra de los genios enanos”en las tierras de « Kaïdara »el dios del oro y del conocimiento, a quien eventualmente encontrarán, no sin pruebas. Sólo Hammadi volverá con vida… Aspirando sólo al conocimiento, el sabio habrá sabido renunciar a los bienes materiales.
En 1968, unos años antes de publicar El extraño destino de Wangrin (1973), que le valió el reconocimiento, Amadou Hampâté Bâ (1901-1991) transcribieron este relato oral en un largo poema versificado. Del escritor maliense, amigo de Théodore Monod, todo el mundo conoce la fórmula, tan famosa que suena a proverbio: “ En África, cuando muere un anciano, se quema una biblioteca. » Kaidara se convirtió en su tesoro literario.
El proyecto de un libro excepcional
Cerrado el libro de Hampâté Bâ, “para no dejarse parasitar”, se dedicó a ilustrar Kaidara durante meses y meses.
Tan complejo como poderoso, este clásico lleno de misteriosas apariciones ahora crepita ante nuestros ojos a través de la deslumbrante pincelada del artista senegalés. Omar Ba (nacido en 1977), cuyas visiones se desvanecen en un libro con un diseño finamente elaborado, publicado por Diane de Selliers. Para acompañar el lanzamiento del elegante volumen, la abundante cosmogonía de colores de Omar Ba brilla, hasta las vacaciones de Navidad, en un exposición gratuita en la galería Temploncalle del Grenier-Saint-Lazare.
Invitado por eleditora Diana de SelliersOmar Ba leyó el texto de Amadou Hampâté Bâ “una vez, eso es todo”, asegura en medio de la grandes formatos seleccionado por su galerista Daniel Templon. En París, el pintor no exponía desde hacía seis años. Cerrado el libro de Hampâté Bâ, “para no dejarse parasitar”, se dedicó a ilustrar Kaidara durante meses y meses, en sus talleres de Bambilor, en la región de dakarasí como Suizadonde comparte su tiempo desde hace unos veinte años.
Un viaje iniciático en 40 obras
El resultado del proyecto, que cuenta alrededor de cuarenta obrases propicio para los sueños. EL Kaidara de Omar Ba está habitada por criaturas híbridas, está marcada por una fauna enigmática – carnero, camaleón, avutarda, gallo –, que emerge en un profusión de plumasque el pintor hace vibrar con un toque texturizado ultrasensorial. Pensemos en Marc Chagall, que prestó su fantasmagoría para ilustrar Las fábulas de La Fontaine.
Antes de hacerse un nombre en el arte contemporáneo a principios de la década de 2010, Omar Ba nació en 1977 en Senegal, de madre Serer y padre fulani. El artista no habla el idioma pero, cuando era niño, fue bañado en las historias de esta etniatransmitido por la voz de los griots. Sobre fondos de papel recubiertos de pintura negra, amarilla o naranja, se cruza el que se formó entre África y Europa con maestría protagonistes en jean azul y referencias Fulani. Sus personajes se sientan entronizados con magnificencia real.
A lo largo de las imágenes, el deleite para la vista, al igual que las interpretaciones, parecen inagotables. Las ilustraciones de Omar Ba son una invitación a ver más allá de lo visible y apreciar lo maravilloso. “Sabrás que sabes cuando sepas que no sabes”, nos dice el dios Kaïdara.
Kaïdara por Omar Ba
Del 30 de octubre de 2024 al 21 de diciembre de 2024
Galería Templon • 28 Rue du Grenier-Saint-Lazare • 75003 París
www.templon.com
Kaidara. Amadou Hampâté Bâ ilustrado por Omar Ba
Un volumen encuadernado en una caja · 40 obras · 70 detalles · 268 p. · ediciones Diane de Selliers Precio de lanzamiento: 230 euros; precio final al 1es Febrero 2025: 250€.
Una copia maestra reúne el libro y un grabado firmado por el artista y numerado, 100 ejemplares disponibles exclusivamente en la editorial: 1.000 €