Un tranvía descarriló el martes en Oslo y acabó chocando contra una tienda en el centro de la ciudad, un accidente extremadamente raro que dejó cuatro personas heridas y provocó el pánico entre los transeúntes.
El accidente se produjo a última hora de la mañana en una zona muy transitada de la capital noruega.
El tranvía, de modelo reciente, que debía dar un giro, por un motivo aún indeterminado, se salió de las vías y terminó su recorrido en una tienda de electrónica, distribuidora de productos Apple, en la esquina de una calle.
Según él, “había mucha gente a bordo”.
“Un poco histérico”
La policía mencionó inicialmente a una veintena de ocupantes, pero un cierto número de pasajeros ya había abandonado el lugar cuando llegaron los servicios de emergencia.
Al menos un transeúnte tuvo que saltar para evitar el tranvía.
El tranvía azul permaneció durante varias horas firmemente incrustado en la tienda, rodeado de cristales rotos, hasta que un camión de recuperación lo sacó al final de la tarde.
“Afortunadamente, un descarrilamiento hizo mucho ruido y varias (personas dentro de la tienda) tuvieron tiempo de girar la cabeza y moverse”, explicó Anders Rønning.
Julie Høgmo Madsen, de 24 años, estaba en la parte trasera del tranvía en el momento del incidente.
“Escuché que empezaba a temblar más de lo habitual en la curva y me di cuenta de que nos habíamos descarrilado, y luego sonó”, dijo a la Agencia de Prensa Noruega NTB.
“La gente se puso un poco histérica y empezó a gritar. Corrí hacia la parte delantera del tranvía y encontré a alguien que necesitaba ayuda y lo ayudé”, añadió.
“Un shock poderoso”
Otro testigo habló de una escena “espectacular”.
“Se formó un gran agujero en la fachada y tuvimos que ayudar a los pasajeros a salir”, explicó André Norheim al periódico Verdens Gang (VG).
“Es simplemente surrealista. Si todos salieron ilesos es porque alguien nos está cuidando porque, por decir lo menos, fue un shock fuerte”, continuó.
La zona fue acordonada, lo que interrumpió gravemente el tráfico en el centro de Oslo. Al lugar se desplazaron numerosos vehículos policiales y ambulancias.
En este momento, el conductor del tranvía, que también resultó herido, tiene la condición de sospechoso; el accidente puede haber sido consecuencia de un exceso de velocidad.
“No quiero especular”, dijo Anders Rønning. “Estamos trabajando en los aspectos técnicos para determinar la causa del accidente”, añadió.
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