“Tengo más confianza que hace dos días y espero tener más confianza al final del fin de semana. » Lara Gut-Behrami está en pleno apogeo en la mítica pista Birds of Prey, ganando impulso tras haber conseguido sucesivamente el 2º, 1º y 4º tiempo de los tres entrenamientos para el descenso de Beaver Creek previstos para este sábado. A pesar de estos buenos resultados en las pruebas cronometradas, Lara Gut-Behrami llegó a Colorado con falta de confianza, marcada por su retirada de última hora del gigante de Sölden, donde no estaba al 100%, y su 14º puesto en Killington.
“Ahora estoy bien”, asegura. “Estoy descubriendo la paciencia, es parte del juego”. Pero es difícil imaginar que una campeona como la esquiadora de Comano, además ganadora del gran Globo de Cristal, haya perdido la fe en su esquí. Y, sin embargo, basta con que un pequeño elemento falle para detener una máquina bien engrasada. “Estuve bien todo el verano y desde mediados de septiembre las cosas se pusieron patas arriba. »
Una rodilla afectada y una enfermedad.
Lara Gut-Behrami cayó enferma, lo que le impidió entrenar durante tres semanas. Esta parada intempestiva en vísperas del inicio del invierno se suma a un golpe que recibió en la rodilla durante el campamento de entrenamiento en Chile este verano, el mismo en el que sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Campeonato del Mundo en St. Moritz en 2017. “Empecé a tener dolor en la rodilla, mis músculos ya no respondían y en la nieve había perdido mis automatismos. » El campeón olímpico de súper G comienza entonces a “pensar, a veces demasiado”. “Cuando las cosas ya no salen con la naturalidad que deberían, se complica. »
¿La solución? Da un paso atrás, pero salta mejor. “Hay que dar pequeños pasos, progresar cada día y poco a poco recuperar la confianza. » Técnicamente, asegura, “no se ha olvidado de esquiar”. El problema sigue siendo poder soltar completamente a los caballos. “Para realmente atreverme, marcar la diferencia, tomar apoyo, estar al límite, debo tener plena confianza en mi físico para marcar la diferencia. » En un deporte como el esquí, la mente juega un papel clave en el rendimiento. “Necesito recuperar esa confianza, darme cuenta de que puedo ir, incluso si hay algo bloqueando mi rodilla, no es gran cosa. Sé que volverá”
La experiencia de Beaver Creek
El esquiador de Comano va progresando en cada salida, ganando confianza poco a poco, tanto técnica como mentalmente. Lara Gut-Behrami también aprovecha al máximo el esquí en una estación que le encanta. Junto con Ilka Stuhec, es la única atleta que ya ha corrido en Birds of Prey, una pista normalmente reservada a los hombres. Fue en 2011 durante un superG tras el cual quedó eliminada. Dos años más tarde, ganó el descenso y el superg organizado en la estación de Colorado, antes de ganar el bronce mundial en descenso en 2015. Pero todos estos éxitos los consiguió en el Raptor, la pista vecina. No importa, el esquiador con 45 victorias en la Copa del Mundo disfruta de la nieve de las Montañas Rocosas. “Siempre disfruto esquiar aquí. Las condiciones son magníficas. »
Este sábado, Lara Gut-Behrami partirá como outsider en el descenso de Beaver Creek, lista para competir con la armada italiana liderada por Federica Brignone y Sofia Goggia. Pero más allá del podio, lo que busca es sobre todo una victoria personal: recuperar una confianza que ahora parece al alcance de las espátulas y volver a ser la formidable esquiadora que dominó el invierno pasado.
Johan Tachet, Beaver Creek