Después de un domingo de descanso tras el gran enfrentamiento del sábado, los azules volvieron tranquilamente a los entrenamientos esta mañana, antes de avanzar poco a poco en preparación para el primer test que se disputará en Mendoza.
Después de un buen domingo dedicado a la recuperación tras la musculosa oposición que enfrentó a los 42 jugadores en las magníficas instalaciones del Club San Isidro (antes de reunirlos alrededor de un magnífico asado honrado con la presencia del ex pilar parisino Rodrigo Roncero), los azules retomaron su semana con tranquilidad, con una sesión de musculación-strechnig-cardio en las instalaciones del Club Atlético Obras Sanitarias, a sólo unos hectómetros del Estadio Monumental de River Plate, cuyo nombre debió haber hecho a los futbolistas más “soñados”. Ejercicios físicos realizados en medio de un público apenas sorprendido por su presencia, durante el cual los hombres de Fabien Galthié no empujaron especialmente la máquina, antes de un entrenamiento igualmente suave de “claridad” en el campo muy cerca del Liceo Naval, la escuela militar de Buenos Aires.
Midi Olímpico – Arnaud Beurdeley
De hecho, sólo durante los días del martes y miércoles el XV de Francia intensificará sus esfuerzos y se preparará para la dura prueba que les enfrentarán los Pumas cerca de Mendoza. Mientras tanto, los ‘bleus’, todavía en modo fútbol, tienen previsto reunirse en el salón de su hotel Emperador, donde seguirán a distancia el partido de los compañeros de Kylian Mbappé contra Bélgica. Antes de pensar (un poquito) en vengarlos durante su test match contra los Pumas en este país donde el culto al dios Messi es todo menos un mito, la imagen del ícono aparece en cada esquina de Buenos Aires.
