Puede que Andi Zeqiri solo tenga 25 años, pero es uno de los líderes de Standard. Hay que decir que los suizos ya han viajado bastante.
Además de ser un zorro de superficie, es un atacante experimentado que el Estándar atrajo a Andi Zeqiri siendo cedido. Porque además del campeonato suizo y de esta visita a Genk, el de Lausana puede presumir de haber jugado en Inglaterra (Brighton), Alemania (Augsburgo) e Italia (Juventus).
Tenía 18 años cuando llegó al Turín: “Terminé máximo goleador con el Lausana y pasamos de D2 a D1: tuve la oportunidad de unirme a la Juventus. Fueron muchos partidos, el campeonato, la Copa y Europa: Me dije que tendría mi oportunidad”, recuerda para RTBF.
En contacto con los mejores
Si al final Zeqiri sólo jugó con la Primavera en categorías de edad, a veces entrenó con el primer equipo: “El primer día no lo creía: vistiendo esta camiseta legendaria, tardé algunas semanas en darme cuenta… Aprendí mucho con jugadores como Buffon, Bonucci, Patrice EvraDani Alvès, Mandzukic, Higuaín e incluso Dybala. Y el entrenador Massimiliano Allegri incluso me llamó por mi nombre: me conocía”.
Una experiencia de la vida real: “Fuera del campo, Dani Alvès y Evra se reían todo el tiempo… pero en cuanto empezó el entrenamiento, ya nadie sonreía: era impresionante. Había charlas, discusiones… y luego, ‘¡De repente, las cosas cambiaron, y fue competencia y duelos! Ahí entendí, que no habían venido a reír sino que vivían para ganar’.
Andi Zeqiri Le debe mucho a esta experiencia: “En Turín vivía solo, pero mi padre venía regularmente porque Lausana no estaba muy lejos. A los 18 años, eres un poco tímido y no te atreves a hablar demasiado con estos grandes jugadores. Les tengo un gran respeto, pero siguen siendo humanos: acaban hablando contigo y haciéndote sentir cómodo”. A partir de ahora, le corresponde a él guiar a los jóvenes de la academia.