Fútbol de Argelia– Durante una reciente intervención ante la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico de la Cámara de Representantes de Marruecos, Fouzi Lekjaa, Ministro Delegado encargado del Presupuesto y Presidente de la Real Federación Marroquí de Fútbol, reveló las grandes líneas de la preparación de Marruecos para acoger La Copa del Mundo de 2030, prevista en coorganización con España y Portugal, esta edición marcará la segunda vez que la competición se celebrará en África, después de la de 2010 en Sudáfrica. Lekjaa expresó la ambiciosa visión de Marruecos para este evento, que implica inversiones a gran escala en infraestructuras deportivas y urbanas.
Según Fouzi Lekjaa, se espera que nada menos que 32 ciudades marroquíes acojan a los equipos participantes. Estos se distribuirán entre diferentes sitios de alojamiento e instalaciones de entrenamiento. Al mismo tiempo, habló de la urgente necesidad de construir en Casablanca un nuevo estadio que responda a las expectativas de una gran base de aficionados, en particular de los clubes emblemáticos de la ciudad, el Wydad y el Raja Casablanca. El Presidente de la Federación subrayó así la importancia de desarrollar infraestructuras de alta calidad para cumplir con los estándares internacionales y ofrecer a los equipos y a los espectadores una acogida óptima.
Lekjaa también recordó que este proyecto forma parte de una dinámica de desarrollo más amplia, iniciada desde el inicio del nuevo reinado. Esta ambiciosa visión incluye la modernización de la red ferroviaria con la extensión del TGV a las ciudades de Marrakech y Agadir, situadas en el sur del país y consideradas centros estratégicos. Al mismo tiempo, los principales aeropuertos del país, en particular los de Marrakech, Agadir, Fez, Tánger y Casablanca, también deberán ampliarse para dar cabida a la afluencia de turistas y visitantes, especialmente en el período previo a la Copa del Mundo.
Estas obras de infraestructura tienen como objetivo no sólo responder a las exigencias de la organización del Mundial, sino también reforzar las capacidades turísticas de Marruecos. De hecho, mejorar estas infraestructuras se considera una palanca para el desarrollo, se celebre o no la Copa del Mundo. Este enfoque sostenible se inscribe en la candidatura de Marruecos para el torneo mundial, que destaca el uso a largo plazo de las instalaciones deportivas y otros proyectos realizados para el evento.
El ministro subrayó también el aspecto inclusivo del Mundial 2030, que debería beneficiar a todas las regiones de Marruecos. De hecho, un equipo con base en Rabat bien podría disputar sus partidos en una ciudad como Nador, situada al este del país. Lekjaa insistió en el carácter “marroquí, africano y árabe” de este evento, que será motivo de orgullo para todo el continente y el mundo árabe.
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