con Théodore Rousseau, la naturaleza en primer plano

Durante mucho tiempo, en un cuadro, la naturaleza se utilizaba principalmente para resaltar a los personajes. Así, a mediados del siglo XIX, el pintor Théodore Rousseau los hizo desaparecer por completo. Con él, por primera vez, la naturaleza y los árboles se convertirán en el tema principal del cuadro. En el bosque de Fontainebleau (Seine-et-Marne), Théodore Rousseau pasa días pintando, tanto en verano como en invierno, y en sus cuadros muestra todos los aspectos del bosque, con árboles vivos y muertos.

Para este ecologista adelantado a su tiempo, la organización de la naturaleza se puede comparar con la de la sociedad humana. “Es republicano, es demócrata y ve en la naturaleza, en toda esta hermandad de plantas, en definitiva, una especie de modelo para el futuro”, explica Servane Dargnies-De Vitry, comisario de la exposición “Théodore Rousseau, la voz del bosque”. Un visionario que glorifica la naturaleza y que incluso conseguirá protegerla. En 1863 obtuvo un decreto de Napoleón III que preservaba cientos de hectáreas del bosque de Fontainebleau. Es la primera reserva natural del mundo.