“Representar el acontecimiento del nacimiento de Jesús equivale a anunciar con sencillez y alegría el misterio de la Encarnación del Hijo de Dios”. Como recuerda el Papa Francisco, el nacimiento de Jesús inspiró a generaciones de artistas que a lo largo de los siglos han evangelizado a través de la belleza. Para vivir el Adviento y la Navidad, Vatican News ofrece cada semana una obra maestra de las colecciones pontificias acompañada de las palabras de los Papas
Paolo Ondarza – Ciudad del Vaticano
La Natividad que os proponemos en la cuarta semana de Adviento está extraída de un tramo de la predela de un retablo de hacia 1450 realizado por Benozzo Gozzoli para la Iglesia de San Fortunato en Montefalco en Umbría. El pintor, alumno predilecto de Beato Angelico, con quien completó su formación tras iniciarse como aprendiz de orfebre, dedicó la tabla a la Virgen María, conocida con el nombre de “Madonna della Cintola”, donada a Pío IX en 1848 y hoy conservado en la Galería de Arte del Vaticano.
Benozzo di Lese, conocido como Benozzo Gozzoli, (Florencia 1420 – Pistoia 1497) Madonna della Cintola, 1450-52, Temple sobre madera, 133 x 164 cm, Inv. 40262, Pinacoteca Vaticana ©Museos Vaticanos
la cintura
En la parte superior del cuadro, la Madre de Jesús rodeada de ángeles, ofrece, como prueba de su ascensión al cielo, el cinturón a Santo Tomás quien, al no haber presenciado la muerte, sepultura y asunción de María, no quiso creer lo que los demás le dijeron sobre lo que había sucedido.
Benozzo di Lese, conocido como Benozzo Gozzoli, (Florencia 1420 – Pistoia 1497) Madonna della Cintola, (detalle), 1450-52, Temple sobre madera, 133 x 164 cm, Inv. 40262, Pinacoteca Vaticana ©Museos Vaticanos
la vida de maria
En la base del retablo, en el panel rectangular pintado con varios paneles, llamado predela, Benozzo expresa sus grandes cualidades como decorador e ilustra episodios de la vida de la Virgen: el nacimiento, las bodas, la anunciación, la natividad de Cristo, la circuncisión de Jesús y la muerte de María.
La Natividad
El Belén en la cueva – cabaña de Belén es íntimo e íntimo. La oscuridad es iluminada por la luz que emana del Niño a cuyos costados están la Virgen y San José, adorando. No faltan las figuras del buey y el asno, extraídas de los evangelios apócrifos. En los laterales de la composición están representados unos pastores que llegaron tras el anuncio nocturno del ángel, pintados al fondo en la parte superior izquierda.
Nace Jesús, la luz verdadera que ilumina a todo hombre
“Fue un ángel quien anunció el nacimiento de Jesús, y lo hizo a unos humildes pastores. Y fue una estrella la que mostró a los Magos el camino para llegar a Belén (ver Mt 2,1.9-10). El ángel es un mensajero de Dios. La estrella nos recuerda que Dios creó la luz (Gen 1,3) y que ese Niño será “la luz del mundo”, como Él mismo se definirá (ver Juan 8.12.46), el. “luz verdadera […] que da luz a todo hombre” (Jn 1,9), que “brilla en las tinieblas y las tinieblas no la vencen””
(Papa Francisco – Audiencia general del 22 de diciembre de 2021)
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