En el caos que lo rodea, las puertas del ayuntamiento del distrito de Europa se abren a la fuerza y se incendian cubos de basura en el vestíbulo. Sólo la intervención de los bomberos evitará que el edificio, inaugurado en 2008, quede reducido a cenizas. Pero los daños fueron importantes: las ventanas explotaron, el hollín invadió todo el edificio y los expedientes de domiciliación del centro de acción social municipal (CCAS) quedaron calcinados. No apto para recibir al público, el sitio está cerrado “hasta nuevo aviso”.
“Descubrí los daños el jueves por la mañana cuando llegué al trabajo. Todos quedamos atónitos”, recuerda Arnaud Botquelen, director del ayuntamiento local. Un sentimiento compartido por la veintena de agentes que ocupan habitualmente estas murallas y por el alcalde de Brest, François Cuillandre, que acudió a comprobar los daños la mañana del 29 de junio. “Un ayuntamiento es al mismo tiempo un símbolo”, señala todavía hoy. Por el momento, los autores del ataque no han sido detenidos.
813.000 € de obra
Dieciocho meses después de estos desastrosos incidentes, cuyas réplicas sacudieron la ciudad y sus barrios más sensibles durante cuatro noches, el ayuntamiento del distrito de Europa se prepara para reabrir sus puertas. Los agentes, realojados desde noviembre de 2023 en la Casa de las Asociaciones de Pen-ar-Créac’h, regresarán progresivamente al lugar durante la semana del 6 de enero de 2025, durante la cual los servicios estarán cerrados al público. El ayuntamiento local reabrirá finalmente sus puertas al público una semana después, el 13 de enero.
Las más largas siguen siendo las negociaciones con las compañías de seguros, de las que esperamos que se cubra parte de los costes.
Fueron necesarios unos 813.000 euros en obras y adquisición de mobiliario para borrar las cicatrices del incendio, con un proyecto que movilizó a una decena de empresas. “Pero lo más largo siguen siendo las negociaciones con las compañías de seguros, de las que esperamos que se cubra parte de los costes. Y por el momento no hemos recibido nada del Estado”, señala François Cuillandre.
Entre las principales partidas de gasto se encuentran la sustitución de redes eléctricas, de calefacción y ventilación, la sustitución de puertas de entrada, carpintería interior y exterior, parte de suelos, falsos techos y aislamientos, sin olvidarnos de los trabajos de pintura de todo el edificio…
Nuevo diseño
Los usuarios descubrirán un ayuntamiento de barrio con una distribución ligeramente modificada. “Aprovechamos este cierre para modernizar la lógica de acogida y de flujo”, defiende Tristan Foveau, teniente de alcalde responsable del distrito. Se ha rediseñado la distribución de la zona de recepción y estado civil, además de la creación de un espacio dedicado a la participación ciudadana y el apoyo digital.
“A los equipos les vendrá bien volver aquí”, anticipa Arnaud Botquelen. Los usuarios también encontrarán el punto de información multiservicio de mediación (Pimms) en Pontanézen, así como las oficinas del Defensor de los Derechos y del conciliador de justicia.
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