El fin de la República de los Jugadores.
En vísperas de desafiar al Arsenal en lo que constituye el partido más importante de su inicio de temporada, el Paris Saint-Germain se presenta con una piedra en las botas: la ausencia de Ousmane Dembélé, marginado por Luis Enrique. Este lunes, el español tuvo que realizar su ejercicio favorito (o no), la tradicional rueda de prensa previa al partido, y los periodistas no dejaron de interrogarle sobre este acontecimiento fuera del campo. « Lo que quiero decir es que si alguien no cumple con sus obligaciones con el equipo, entonces no está preparado. Considero que esta semana es importante, que este partido es importante y quiero que mis jugadores estén en las mejores condiciones posibles. Lo dejo a un lado y quiero lo mejor para mi equipo”-declaró Enrique al principio un poco evasivo.
Una decisión plenamente validada por la dirección parisina, según Enrique
Antes de decir un poco más a raíz de un seguimiento de un periodista. “¿De verdad crees que es fácil crear un equipo? ¿Que lo hacemos pulsando un botón? No, hay circunstancias difíciles, decisiones difíciles. Estoy 100% comprometido con mis decisiones, estoy 100% seguro de mis decisiones y Lo considero lo mejor para el equipo, sin duda. Pero mis decisiones no son irreversibles. Fiché por este club para hacer un equipo con identidad, que juegue al fútbol. ¿Me contrataron para ganar títulos y ganar la Champions? Ciertamente no. Me contrataron para hacer lo mejor que pudiera. Tengo el apoyo de la dirección, del director deportivo, del presidente. Estoy aquí para crear un equipo y hacerlo también con Ousmane Dembélé. […] Hay un problema con el compromiso del jugador con el equipo, pero no un problema entre el jugador y el entrenador”.concluyó sobre el tema, antes de no querer seguir hablando del tema.
Y no sabremos el final de la historia de inmediato.
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