Hace unos días informamos que algunos medallistas olímpicos en París estaban notando lo rápido que se deterioraban sus medallas. Esto sólo pareció afectar a las medallas de bronce: después de apenas unos meses, expuestas al aire, a la humedad y a los dedos de amigos y familiares, las medallas se degradaron hasta el punto de que el nadador francés Yohann Ndoye Brouard bromeó diciendo que parecía “París 1924”.
Este no fue un incidente aislado. Hace unos días, el boxeador español Enmanuel Reyes Plá también publicó en LinkedIn una foto de su medalla de bronce. “Cuando gané mi medalla en París 2024, nunca imaginé que tendría que investigar en Internet para saber cómo cuidarla, pero aquí estamos”.
“¿Escandaloso? Por supuesto. ¿Sorprendente? Para nada. Como atletas, estamos acostumbrados a enfrentar desafíos en el ring, pero nunca pensamos que el verdadero desafío vendría después de la victoria”, y agregó que no se trata de vanidad, sino de ” proteger lo que simboliza el esfuerzo colectivo: el mío, el de mi equipo y el de todos los que creyeron en mí”, que debe “durar para siempre”.
El pasado mes de agosto, el comité organizador de París 2024 ya había tomado nota del deterioro de numerosas medallas de bronce y declaró que “las medallas son los objetos más preciados de los Juegos y serán reemplazadas sistemáticamente por la Casa de la Moneda de París, con grabados idénticos a los originales. . Sin embargo, es posible que tengan que reemplazarlos a todos….
