La influencer argelina, conocida bajo el seudónimo de dos maderas en TikTok, fue deportado a Argelia el jueves, a pesar de una audiencia prevista para finales de febrero para responder a los cargos de provocación de violencia. La información fue confirmada a la AFP por su abogado, Jean-Baptiste Mousset.
Este hombre, de 59 años y empleado como agente de limpieza en un pabellón deportivo, fue detenido el domingo en Montpellier tras la publicación de un polémico vídeo en TikTok. Como informa jeanmarcmorandini.com, el contenido, denunciado por el alcalde de Montpellier Michaël Delafosse y el prefecto de Hérault François-Xavier Lauch, habría incitado a la violencia contra un opositor al régimen argelino.
Internado el martes en un centro de detención administrativa (CRA) de Nimes, fue trasladado el jueves a París antes de partir hacia Argel. Según Me Mousset, su cliente pudo contactar con él desde la pista del aeropuerto, justo antes del despegue. El abogado acusa al Gobierno de haber precipitado esta expulsión para eludir el examen de legalidad del decreto firmado por el ministro del Interior, Bruno Retailleau.
“El gobierno utilizó medios excepcionales para amordazar a mi cliente”, denunció Mousset. El miércoles presentó un recurso ante el tribunal administrativo de París para impugnar esta medida.
En el vídeo denunciado, el hombre supuestamente llamaba en árabe a “matar” y “hacer sufrir” a un opositor del gobierno argelino. Sin embargo, el fiscal de Montpellier, Fabrice Belargent, aclaró el martes que dos intérpretes expertos no habían observado tales términos en sus traducciones. Según sus análisis, el vídeo contenía un llamamiento a aplicar una “corrección severa” a un individuo residente en Argelia, pero no un llamamiento explícito al asesinato.
A pesar de estos elementos, el prefecto de Hérault justificó la expulsión afirmando que las declaraciones constituían un llamamiento a la tortura. “Esto es suficiente para revocarle el permiso de residencia”, declaró.
El miércoles se llevó a cabo una evaluación psiquiátrica, ordenada por la fiscalía, que permitió dictar sentencia sin la presencia personal del acusado. Sin embargo, la audiencia prevista para el 24 de febrero ante el tribunal penal de Montpellier podría perder su alcance, ya que el influencer ha abandonado el territorio francés.
Según su abogado, el influencer reconoce una “laguna” en el lenguaje que lamenta amargamente, aunque niega haber lanzado un llamamiento al asesinato. Mousset cree que este caso ilustra un uso político de la expulsión para limitar la libertad de expresión de su cliente.