El último nacido de Con resorte Hace un tiempo abrió su corazón hablando de su famoso padre y su relación.
Rosalinda Celentano es una artista que proviene de una de las familias más famosas del mundo del espectáculo italiano. A pesar de ello, no le gusta mucho ser el centro de atención pero hace dos años, gracias a su participación en Bailando con las estrellas se ha dado a conocer un poco más al gran público.
Una cosa que fue particularmente sorprendente fue su confesión en el programa Serena Bortone, hoy otro dia (ahora cancelado de los horarios), donde se decía con una sinceridad sorprendente, ofreciéndose al público una mirada íntima sobre la compleja relación con sus padres, ambas figuras icónicas del panorama artístico italiano.
La actriz, que ahora tiene 56 años, recordó Momentos difíciles de su juventud.marcada por malentendidos con la madre y la percepción de un padre demasiado dedicado a su carrera. Sus palabras fueron escuchadas atentamente por la presentadora que con delicadeza logró tranquilizar a su invitada.
Una relación que nunca se ha roto
Rosalinda Celentano tiene una trayectoria que abarca desde la música y el cine hasta el mundo del arte y la edición. De hecho, su vena artística no tiene límites, aunque recientemente se haya alejado de la pantalla chica.
Sus palabras pronunciadas en el programa. Serena Bortonereflejan el vínculo que tiene con su familia, especialmente con padre adriano: “Mi madre era demasiado joven porque a los 22 años tenía cuatro hijos. Considero a mi padre el cuarto hijo y por eso creo que se dicen ciertas cosas aunque no lo diga en serio.” declaró con un chiste que resume el temprano sentido de responsabilidad experimentado en la familia. Pese a ello, contó cómo el talento y la dedicación de Adriano a la música siempre lo han inspirado una profunda admiración en ella.
Como ella misma dijo con tan solo 18 años tomó una decisión drástica: abandonó el hogar familiar. Una elección dictada por la necesidad de liberarse del peso del apellido y de descubrir quién era realmente. “Me fui a encontrarme con Rosalinda, ya no Rosalinda Celentano”, explicó. Esa fuga marca el comienzo de un viaje personal. duró cinco años, durante el cual vivió experiencias que la afectaron profundamente.
Entre las revelaciones más sorprendentes, contó Rosalinda de haber vivido con algunas personas sin hogar en Estados Unidos: “La calle es una gran escuela. Yo estaba con ellos, inconsciente, porque a esa edad te sientes omnipotente. Pero fue una experiencia que me enseñó mucho.”. Un período intenso, durante el cual la actriz se enfrentó a una realidad dura pero formativa.
Pese a las dificultades, Rosalinda aclaró el vínculo con sus padres nunca se rompió. La figura de Adriano, a pesar de las ausencias ligadas a compromisos artísticos, sigue siendo para ella una fuerte presencia y un ejemplo de inspiración. “ELy las relaciones familiares nunca son sencillas, pero eso no quita el respeto y el amor”, concluyó dulcemente.