Este jueves Gante viaja a Larne en el marco de la Conference League. Un sexto y último encuentro que podría permitir a los Buffalos incorporarse al top 8.
Pero Wouter Vrancken lo sabe: no todo depende de él y de sus hombres. Si existe el deseo de clasificarse directamente para los octavos de final de la competición, es posible que eso no suceda. De cualquier manera, no hay preguntas, hay que prevalecer.
“Nuestro destino no está en nuestras manos”
“Esto marca la diferencia en nuestro calendario”, explica el entrenador del Gante. “Unos pocos partidos menos no son una desventaja. Pero no tenemos nuestro destino en nuestras manos”.
Para Wouter Vrancken, si realmente existe el deseo de ganar, hay un elemento que plantea un problema al entrenador: el estado del terreno de juego del club norirlandés. Decir que está en malas condiciones es quedarse corto.
“Es una pena”
“El campo está en muy malas condiciones. No puedo decirlo de otra manera. Apenas hay césped. Incluso en mis primeros años de fútbol no tenía que jugar en ese césped. Es una pena tener que jugar en un campo así en Europa”, dijo Vrancken.
Independientemente del estado del terreno de juego, tendremos que lidiar con este elemento y hacer todo lo posible para sumar los tres puntos. Luego tendremos que concentrarnos directamente en el duelo en Standard que se avecina y que también debe resultar en una victoria para no dejar escapar a los equipos que van por delante en la Jupiler Pro League.