Precisamente en la Suiza alemana, en Winterthur, no lejos de Zúrich, en el aparcamiento de la gran cadena minorista Lidl, una mujer discapacitada recibió una multa por aparcar su vehículo en un espacio reservado a las personas. con discapacidades. Sin embargo, el vehículo de la sexagenaria que padecía esclerosis múltiple sí tenía su placa que acreditaba que estaba discapacitada. Excepto que, en este aparcamiento gestionado por una empresa privada, Todas las plazas, incluidas las reservadas a personas con movilidad reducida, están autorizadas para… ¡una hora como máximo!
Está bien lo que bien acaba
Como resultado, la víctima en cuestión que, a causa de su grave discapacidad, había tardado 1 hora y 42 minutos en hacer sus compras en Lidl antes de regresar a su coche, recibió, 48 horas más tarde,una multa de 40 francos suizos (unos 42,65 euros) por parte de la empresa privada que gestiona este aparcamiento Lidl. Y si efectivamente un cartel (que el conductor no había visto) menciona en este aparcamiento que en caso de exceder el tiempo permitido se impondrá una multa, la sanción aquí, cuanto menos injusta, recibida por exceder el plazo del vehículo de esta persona discapacitada, fue finalmente cancelada, mientras que la dirección de Lidl pidió disculpas a este cliente, indica la prensa suiza.