Bautizado como Ivan Frolov, en homenaje a un geógrafo, oceanógrafo y glaciólogo ruso, nacido en 1949 y fallecido en 2020, este barco fue depositado a finales de octubre en San Petersburgo. Previsto para ser entregado en 2028 a Roshidromet, el Servicio Federal Ruso de Hidrometeorología y Vigilancia Ambiental, medirá 164,8 metros de largo, 26 metros de ancho y 8,5 metros de calado, y se espera que su desplazamiento alcance las 25.300 toneladas. Equipado con un casco rompehielos, con clasificación Arc7 que le permitirá atravesar témpanos de hielo de más de 2 metros de espesor, el Ivan Frolov podrá alcanzar velocidades de 16 nudos en aguas abiertas.
Armado por una tripulación de 70 marineros, podrá albergar a 170 científicos que contarán con 20 laboratorios a bordo. Equipado con importantes medios de elevación, que permitirán la manipulación de contenedores y equipos, el Ivan Frolov dispondrá de un hangar con capacidad para albergar dos helicópteros y una plataforma con capacidad para albergar una máquina de tipo Mi-8 o Ka-32.
En última instancia, está destinado a suceder al antiguo Akademik Federov (141 metros, 16.200 toneladas), construido en Finlandia y puesto en servicio en 1987. Pero este venerable barco, presentado por los rusos como en buenas condiciones, debería continuar su carrera una vez que la nueva unidad entrar en la flota, siempre que sea posible, dijo a la agencia de noticias TASS el jefe del servicio hidrometeorológico ruso, que también cuenta todavía con una unidad aún mayor El antiguo Mikhail Somov (133 metros, 14.135 toneladas), entró en la flota en 1975 y todavía está en servicio.
Propiedad de Roshidromet, el nuevo buque será operado por el Instituto Ruso de Investigaciones Árticas y Antárticas (AARI). Dirigirá misiones de investigación y operaciones logísticas en beneficio de las bases científicas rusas en el Ártico y la Antártida. “Después de su puesta en servicio, el barco se convertirá en el buque insignia de la flota Roshidromet. A bordo albergará un potente complejo científico que permitirá realizar investigaciones incluso en las condiciones más difíciles, incluidos estudios del fondo marino, la atmósfera y el espacio. Y, en general, este proyecto polivalente garantizará el funcionamiento ininterrumpido de las estaciones polares de Roshidromet”, declaró el viceprimer ministro ruso, Dmitri Patrushev, con motivo de la ceremonia de inmovilización del Ivan Frolov. Este último también destacó que “el estudio del Ártico y la Antártida es una de las áreas clave de actividad del Servicio Federal. Cada año ya se realizan más de 20 expediciones. Permiten monitorear el cambio climático, recopilar datos para el desarrollo de la navegación en la Ruta del Mar del Norte y aclarar los límites de la plataforma continental rusa. Y el Viceprimer Ministro concluyó que “la aparición del nuevo barco reforzará sin duda nuestra posición en las regiones polares”.
El Ivan Frolov será, según Admiralty Shipyards, el barco de este tipo más grande del mundo. Será notablemente un poco más grande que el nuevo australiano Nuyina, un rompehielos científico y logístico de 160,3 metros de largo, 25,6 metros de ancho y 25.500 toneladas puesto en servicio en 2021. Superará más claramente al británico Sir David Attenborough, en 128,9 metros de largo y 24 metros. de ancho, ingresó a la flota en 2020.
© Un artículo de la redacción de Mer et Marine. Prohibida la reproducción sin consentimiento del autor(es).