Esta moneda fue acuñada entre el 43 y el 42 a. C. por “Bruto y sus amigos que asesinaron a Julio César” en marzo del 44 a. C., explica. La venta del objeto podría superar el millón de francos y “podría ser bastante alta”, ya que se trata de un “Da Vinci de la moneda romana”, según Frank Baldacci.
Un espécimen de los 17 conocidos
Este aureus en particular presenta en el frente el perfil de la cabeza de Bruto rodeada de hojas de laurel y en el reverso celebra sus recientes victorias militares con símbolos guerreros. Es uno de los 17 ejemplares conocidos, según la casa de subastas.
Esta pieza, “fabricada no en Roma sino en un taller que se trasladaba con Bruto y sus ejércitos mientras intentaba hacerse con el poder después de haber asesinado a Julio César”, tenía también un “valor propagandístico”, afirma Frank Baldacci.
La corona de laurel es en realidad el signo de “alguien que quiere promocionarse como emperador”, que quiere ser “califa en lugar del califa”, señala, destacando la inscripción “IMP” – para Imperator, jefe de los ejércitos, un título que se convertiría en hereditario bajo el Imperio.
“Extremadamente raro”
La moneda fue acuñada poco antes de la famosa batalla de Filipos, que Bruto perdió contra Marco Antonio y Octaviano y al final de la cual “se suicidó”, explica Frank Baldacci.
El aureus ha viajado a través de los siglos, pasando de mano en mano, fuera de la vista. “Pero sabemos que durante el Renacimiento había muchos príncipes y señores que tenían colecciones de monedas romanas”, subraya Frank Baldacci.
La pieza no resurgió hasta la década de 1950, cuando se publicó en el catálogo de un coleccionista privado. Posteriormente reapareció en una subasta en 2006 en Zúrich, donde fue vendido a otro coleccionista privado por 360.000 francos suizos. “Es una moneda que vuelve al mercado después de una generación. Se trata de piezas extremadamente raras y la posibilidad de adquirirlas es igualmente rara”, señala Frank Baldacci.
La moneda está encerrada en una caja hermética para evitar modificaciones y “garantizar su autenticidad”, afirma, explicando que la certificación por parte de empresas especializadas se realiza, en particular, comparándola con otras monedas antiguas y examinando el oro utilizado. .